Pese a la nefasta derrota de la UD Las Palmas en Anduva frente al Mirandés (2-1), el cojunto amarillo puede sacar varios aspectos positivos del encuentro, sobre todo de la vuelta a los terrenos de juego de jugadores que en las últimas jornadas habían tenido participación en el equipo.

Paco Herrera, ante la baja ya conocida de Hernán Santana, eligió como acompañante de Javi Castellano en el doble pivote a Roque Mesa, que prácticamente no había jugado en el último mes de competición. Su última titularidad, frente al Numancia en Los Pajaritos, había sido empañada por no haber jugado ni un solo minuto frente al Real Betis, al Sporting de Gijón o contra el Albacete, así que muchos ojos estuvieron puestos en él.

Roque tuvo su última titularidad en Soria

Y con diferencia, Roque sería de los mejores del encuentro en el conjunto amarillo. Rápido en las recuperaciones, con visión de juego a la hora de organizar jugadas ofensivas, preciso con los pases, eficiente en defensa...el jugador ha hecho olvidar el ostracismo al que se le había sometido para cuajar una de sus mejores actuaciones de la temporada.

Roque Mesa con Javi Castellano en el doble pivote. Foto: LFP.es

La otra nota positiva del encuentro la ha puesto Asdrúbal Padrón. El de Guanarteme no había tenido minutos desde la derrota amarilla en Soria, y la desfortunada lesión de Alfredo Ortuño hizo que Paco Herrera le pusiera en el terreno de juego. Y sería Asdrúbal el que, con el carácter eléctrico que posee, pusiera un gran centro a Aythami Artiles en la mejor oportunidad amarilla para empatar el partido.

Así pues, Paco Herrera sabe que en este tramo decisivo de la temporada y con las lesiones de Nauzet y Ortuño y además con Sergio Araujo apercibido de sanción, el fondo de armario del conjunto canario tiene calidad y ganas suficientes para ayudar al equipo en el objetivo del ascenso.