Javi Gracia tiene las ideas claras, desde el principio apostó por un estilo de juego vistoso y ofensivo, que llevase las riendas del partido y que dominase la posesión el mayor tiempo posible. La línea de tres cuartos es fundamental para este propósito, la presión se debe realizar en campo contrario para así forzar el error del rival en una zona comprometida. Los centrocampistas muerden a la defensa rival para que no saquen el balón jugado, si fallan la ocasión de gol puede ser clara, si recurren al balón largo siempre hay más posibilidades de recuperar la posesión del esférico.

Queda clara la importancia que tienen los mediapuntas en el Málaga. Esos tres puestos están bien cubiertos por Juanmi, Samuel  y Castillejo o Ricardo Horta. Juanmi es el más destacado de todos, ha madurado en la última temporada y no le tiembla el pulso a la hora de echarse el equipo a la espalda. Samuel ocupa una de las bandas, la derecha habitualmente, aprovecha así su precisión en el centro aunque se suele descolgar por el centro para sorprender a la línea defensiva. El otro puesto no tiene un jugador fijo, Luis Alberto empezó de titular y su disparo lejano daba muchas posibilidades al equipo pero Javi Gracia perdió la confianza en él y ha empezado a caerse de las convocatorias. Ricardo Horta, el talento luso, es otro de los habituales para ocupar una de las bandas. Queda clara la importancia que tienen los mediapuntas

Una vez que el medio campo está formado e instruido para lograr un Málaga agresivo en la presión hay que pensar en la delantera. Aquí entra en juego Amrabat que en un principio iba a ocupar una de las bandas. Santa Cruz sería la referencia arriba, su juego de espaldas permite optar por balones largos y dar lugar a segundas jugadas, su buen remate invita a apostar por extremos rápidos y que centren a menudo en busca del cabezazo del paraguayo. Gracia, que prefiere combinaciones rápidas y por dentro, piensa en Santa Cruz como una alternativa para las segundas partes, cuando se necesita marcar y apuesta por un delantero fijo.

La primera opción del técnico navarro es Amrabat, una especie de falso `9´ que encaja en la filosofía de juego de este nuevo Málaga. El holandés de origen marroquí ofrece movilidad lo que crea huecos en la defensa que pueden aprovechar Juanmi y compañía. La creatividad del `2´ blanquiazul le permite combinar con Samuel o Castillejo lo que da una velocidad más a las triangulaciones del equipo. Además, su olfato de gol augura unas cifras mejores de las que ya firmó el curso pasado. Cuando el equipo contrario lleva las riendas del encuentro, como ocurrió contra el Barcelona, la velocidad de Amrabat es el arma ideal para armar un contragolpe. Un delantero multiusos que hace jugar y se adapta a las distintas necesidades de un partido. La primera opción del técnico navarro es Amrabat

Hoy por hoy la apuesta es clara, Amrabat en punta de ataque creando la confusión en la línea defensiva y dejando espacio para tres mediapuntas con instinto goleador. La polivalencia del holandés es otro valor añadido para un equipo que le va a echar de menos durante este mes de baja por lesión. Gracia tendrá que remodelar su esquema aunque respira aliviado desde que sabe que Nordin no jugará la Copa África.  

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Sobre el autor
Pablo Hoz
Periodismo en la Universidad de Málaga