La temporada de Marcos Angeleri ha sido atípica. El jugador nacido el 7 de abril de 1983 en una localidad argentina llamada Treinta de Agosto, ha pasado por buenos y malos momentos.
Angeleri comenzaba el año futbolístico sin disputar un solo minuto en los seis primeros encuentros de la competición liguera, para debutar frente al Granada. Y el estreno no fue muy bueno, ya que a los 72 minutos de juego era expulsado con roja directa.
Tras esto, tres partidos de “descanso”, para comenzar luego una racha de 16 participaciones en 20 encuentros. Angeleri se benefició de las bajas en defensa, casos de Flavio Ferreira o Sergio Sánchez, y de la casi nula aportación de Filipenko. Ha acabado la temporada arrebatándole la titularidad a un Sergio Sánchez ya recuperado.
Hay que apuntar en su debe las expulsiones ante Granada y Rayo Vallecano. De hecho, en tierras nazaríes su error condicionó el encuentro. Sin embargo, en otros choques ha rendido a buen nivel, acabando siendo titular en el centro de la defensa blanquiazul.
Pocas tarjetas pero dos expulsiones
El central no ha visto puerta este año, aunque tuvo varias ocasiones claras para marcar. Acaba la temporada con 1.953 minutos en Liga y 515 en Copa, repartidos en 28 encuentros en los que fue titular en todos menos uno.
Sus dos expulsiones fueron determinantes, ya que en sendos encuentros el Málaga salió derrotado. Es curioso que a las dos tarjetas amarillas que supusieron su expulsión en Vallecas, solo haya que sumarle otras dos, frente a Villarreal y Granada, por lo que lo cierto es que ha sido muy poco amonestado para desempañar una posición de riesgo, como la de central.
Su renovación, a punto de cristalizar
Si bien comenzó el año sin entrar en los planes del míster, y atravesó fases en las que fue duramente criticado, ha sabido "robarle" la plaza a Sergio Sánchez, y de hecho, están abiertas y muy encaminadas las negociaciones para ampliar su contrato.
Su papel en la próxima campaña también dependerá en buena medida de las prestaciones de Weligton, ya muy veterano, de la recuperación de Flavio Ferreira tras un año en blanco por culpa de las lesiones, de la participación de Filipenko, solo 26 minutos en Copa, y de la improbable renovación de Sergio Sánchez que, salvo sorpresa de última hora, no seguirá.