Samu Castillejo ha sido la irrupción más feliz de la temporada. El “flaco” se enfrentaba a la temporada 2014/15 con la ilusión de debutar en la máxima competición, de disputar algunos minutos y de no quedarse fuera de las convocatorias en muchas ocasiones, pero ha acabado siendo titular indiscutible para un Javi Gracia que ha confiado, sin reservas, en él.

Su estreno se producía en la segunda jornada, contra el Valencia, cuando entraba al terreno de juego en el minuto 57 sustituyendo a Juanmi. Solo tuvo que esperar a la quinta fecha para ser titular, y nada menos que ante el Barcelona, encuentro en el que deslumbró a todos los que no le conocían, que entonces eran legión.

A partir de ahí, Samu se ha ido consolidando como un jugador titular en el equipo, y a pesar de su falta de kilos, su insolencia y descaro con el balón en los pies, le han valido para ser el centro de las miradas de los ojeadores de muchos equipos de la élite del fútbol europeo.

Su buena temporada le ha avalado para debutar también con la Selección sub21, y para formar parte del Once de Oro de Fútbol Draft, por delante de jugadores como Gerard Deulofeu, Moi Gómez, Álvaro Vadillo o Adama Traoré, siendo el único jugador andaluz incluido en el citado Once.

Samu Castillejo en acción por la banda derecha. (Foto: LFP.es)

Un gol y cinco asistencias

Si el debut en la categoría se produjo en la primera vuelta ante el Valencia, fue el mismo rival, pero en la segunda mitad del campeonato el que recibió el único tanto logrado por el extremo de solo 20 años. El gol supuso la victoria 1-0 ante el equipo che.

En la temporada de su debut ha disputado nada menos que 2.430 minutos en Liga y 121 en Copa, repartidos en 39 encuentros en los que fue titular en 28 ocasiones. Castigado por sus rivales, que intentan aprovechar su poca corpulencia, Castillejo va a por todas y no se arruga. Cinco cartulinas amarillas ha visto, casi todas por hacer frente a sus marcadores.

Castillejo supera a Isco en La Rosaleda (Foto: LFP.es)

Un futuro muy prometedor

Un tanto y cinco pases de gol no son poco botín para un novato en la categoría, pero es de esperar que su producción goleadora aumente con el tiempo. Esa falta de gol y sus pocos kilos son los principales aspectos que debe mejorar.

La próxima campaña debe ser uno de los pilares del equipo, calidad y desparpajo no le faltan, y a poco que la suerte le acompañe se convertirá, no ya en la revelación, que lo ha sido este año, sino en el estandarte del Málaga en su afán por seguir creciendo.