En la derrota ante el FC Barcelona hubo cuatro jugadores que tuvieron la oportunidad de disputar sus primeros minutos defendiendo la camiseta del equipo de La Rosaleda esta temporada. Ante el Sevilla fueron 14 futbolistas los que debutaron, como es lógico, los once titulares y los tres futbolistas que salieron desde el banquillo. Pero la entidad del rival cambió al visitar el Nou Camp y las ausencias y bajas provocaron que fueran cuatro futbolistas más los que pisaran el verde por primera vez en este inicio de Liga BBVA: Miguel Torres, Weligton, y Recio.

El lateral izquierdo Miguel Torres, el centrocampista Recio y el central y capitán Weligton fueron titulares en un equipo que salió a darlo todo al Nou Camp. El primero realizó un partido muy completo, tapando a Messi y compañía durante los noventa minutos y siempre apoyado por un solidario Juan Carlos. El zaguero central, por el contrario, tuvo que ser sustituido a los 25 minutos por lesión, dejando su sitio a Raúl Albentosa, quien realizó posteriormente un gran partido. Weligton no tuvo el "debut" soñado, pero sin duda volverá más fuerte que nunca para seguir dando guerra a los delanteros rivales.

En el centro del campo estuvo Recio, que sustituía a un Sergi Darder que tras ser titular ante el Sevilla, pone rumbo a Lyon. La noticia se conoció en la mañana del mismo sábado, día del partido, y Espinho entró en la convocatoria en su lugar, aunque posteriormente no debutó. Recio realizó un partido soberbio en la medular, distribuyendo el juego y llegando arriba en las escasas acometidas de los de Javi Gracia, cuajando en definitiva un buen debut esta temporada.

Juanpi fue el último en entrar al terreno de juego, aunque éste ya debutó ante el Sevilla FC. Salió cuando apenas faltaban 20 minutos de partido para buscar algún balón o jugada con la que empatar el gol de Vermaelen, pero no tuvo suerte. Tuvo que trabajar mucho en defensa y apenas entró en contacto con la pelota. El canterano boquerón deberá esperar una oportunidad mejor para demostrar su calidad y poder ganarse un hueco en las alineaciones.