Con agosto se fue el calor, las vacaciones, el tiempo libre y los fichajes. Con el día 31 se cerraron las plantillas no sin novedades de última hora. El Málaga CF se hizo con los servicios de Hachim Mastour, fichaje oficializado apenas una hora antes del cierre del mercado. Días antes dejó el equipo Sergi Darder, uno de los hombres importantes en el centro del campo de Javi Gracia. Anteriormente, el mercado empezó con tintes dramáticos, ya que Juanmi, Samuel Castillejo y Samuel García, tres de los pilares del Málaga CF que estuvo persiguiendo el sueño de la UEFA Europa League, dejaban el equipo blanquiazul. Esto, sumado a la posible venta del club por Abdullah Al-Thani, hacían tambalearse los cimientos de un club que ha conseguido refuerzos de renombre como el de Charles o Albentosa y otros de los que se espera rendimiento a largo plazo, casos de Mastour, Duje Cop o Tighadouini.

Dejar salir antes de entrar

Esta famosa frase fue adoptada por el Málaga CF al pie de la letra. Con la finalización de junio y el inicio del mes de julio, se hicieron efectivas tres de las ventas más importantes en el último lustro blanquiazul. La primera fue la de Juanmi, el menudo delantero que puso rumbo a Southampton, donde no le marchan bien las cosas. Solo ha jugado un partido y aún no ha anotado ningún gol. Su salida dejaba resentida la delantera, ya que Javi Guerra, cedido por el Cardiff City en el mercado invernal, también dejaba el club para volver a las islas británicas. Por la venta del coíno se ingresaron siete millones de euros ya que el equipo de Koeman pagó la cláusula de rescisión por la que el jugador quedaba liberado del Málaga CF.

Otros dos canteranos iban a ser los elegidos para dejar la disciplina a principios de verano: Samuel Castillejo y Samuel García. Ambos pusieron rumbo al Villarreal dejando en las arcas del equipo andaluz un total de 16 millones de euros de los que solo once se quedaron en Málaga. Este problema ha sido recurrente en el equipo de Martiricos, ya que los fondos de inversión y diversas cláusulas en los contratos de los jugadores han provocado que una parte del dinero recogido se marche hacia otras entidades. Con su salida, el equipo quedaba falto de ataque, por lo que fue en ese sentido por donde se encaminaron las búsquedas.

Despedida de Samu Castillejo

A estos tres jugadores se unió la salida de otro que tenía menos repercusión: Ezequiel Rescaldani. El argentino apenas contaba para Javi Gracia y la dirección deportiva decidió cederlo al Puebla FC, un equipo mexicano que se reserva la opción de compra del delantero. En el mismo caso que Rescaldani estaba Luis Alberto, un jugador que fue de más a menos en la temporada 14/15. Empezó como titular indiscutible para el navarro pero con el paso de los partidos fue a menos hasta quedarse en el banquillo. Su poca participación y su actitud sobre el terreno de juego llevaron al equipo a devolverlo a Liverpool, lugar desde el que llegó cedido. Otro caso similar es el de Roberto Chen, que ha salido cedido al Linense donde se intentará que olvide el gran tramo de lesiones que lleva tras de sí y que le han lastrado durante todo el curso 2014/2015 y principios del 2015/2016.

Sergi Darder debutó en la Liga BBVA 15/16

Más repercusión tenían los dos últimos hombres: Sergi Darder y Sergio Sánchez. El primero era el volante del Málaga CF. Alrededor de él se fraguaba el equipo y conseguía mover los hilos para que los resultados llegasen. Sin embargo, el interés del Oporto, del Manchester City y del Olympique de Lyon, siendo este último equipo el que se ha hecho con sus servicios, han incitado al jugador a declarar que se quería ir. Incluso ha debutado en la Liga BBVA, jugando el primer partido ante el Sevilla FC, lo que deja evidente que Javi Gracia sí contaba con él. Finalmente, en los últimos días de mercado, 12 millones de euros le han llevado al equipo francés, donde jugará la UEFA Champions League.

Respecto al segundo hay que añadir que la conexión con la afición se había enturbiado en los últimos años. A pesar de llevar mucho tiempo en la entidad, Sergio Sánchez no se sentía cómodo. Estaba vigilado constantemente en el terreno de juego y cualquier fallo era mirado con lupa y puesto en entredicho. Finalmente, el catalán se ha marchado al Panathinaikos griego. La última baja del equipo en este mercado de fichajes fue la de Bobley Anderson, un jugador que llegó tras su cesión en el Alcorcón y que ha rescindido el contrato con el equipo andaluz.

Entradas ilusionantes

Si el principal problema estaba en la delantera, lo lógico era que esa posición fuera la más reforzada, y así ha sido. Tres hombres han sido fichados para el puesto de delantero centro: Duje Cop, Charles y Roque Santa Cruz. El primero es un croata que ha llegado cedido aunque el Málaga CF se reserva la opción de compra por tres millones de euros. Con 25 años ya ha demostrado que tiene gol. En la pretemporada se erigió como el máximo anotador del equipo malagueño y en la última jornada de Liga fue titular, nada más y nada menos, que en el Camp Nou.

El segundo llega procedente del Celta, donde casi no contaba. La operación se cerró en medio millón de euros, aunque hay variables que pueden llevar al club gallego otros 200.000 euros más. Ha demostrado que sabe entenderse con Duje Cop, que se las puede apañar solo en la punta de ataque y que nunca da un balón por perdido. Es del gusto de la afición y sin lugar a dudas, a sus 31 años, puede aportar toda la experiencia necesaria en la delantera. Quien también puede aportar experiencia es Roque Santa Cruz, que vuelve al Málaga CF en calidad de cedido procedente del Cruz Azul mexicano. Las lesiones son su principal hándicap, aunque su anterior estancia en la Liga BBVA le puede ayudar a una rápida adaptación. Estos tres hombres serán los encargados de sembrar el pánico en el área rival, aunque no serán los únicos.

Hachim Mastour, Tighadouini y Amrabat son otros de los fichajes que pueden desenvolverse en terrenos cercanos al área rival. Todos ellos tienen la particularidad de ser de Marruecos. El primero llegó el último. Tiene 17 años y es un deseo del jeque Abdullah Al-Thani, que le envió un avión privado hasta Italia, ya que jugaba en el AC Milan, para que llegase a Málaga a firmar el contrato. Un contrato que le vincula al equipo andaluz en calidad de cedido durante dos años, aunque existe una opción de compra. Con el segundo sucede algo que ya sucedió con Amrabat. De él se espera velocidad y desequilibrio en las bandas. Llegó al Málaga CF tras el pago de 800.000 euros al NAC Breda holandés. Estaba deseoso de jugar en una liga superior a la holandesa por lo que la Liga BBVA le llamó enseguida la atención. Su incorporación ha sido más fácil gracias a Amrabat, su compatriota que también es considerado uno de los fichajes del equipo ya que se pagó parte de su traspaso al Galatasaray.

Amrabat es el principal apoyo de Tighadouini en el Málaga CF

Queda por pagar parte del fichaje de Amrabat

Esto no fue sencillo, ya que el equipo turco enturbió las negociaciones en varios momentos e incluso el acuerdo llegó a estar roto. La visita de Amrabat a Turquía, para visitar a su familia, desató un auténtico polvorín en redes sociales, donde la afición sentía que el club iba a vender a uno de los jugadores más importantes de la plantilla. Finalmente, el equipo blanquiazul se hace con sus servicios de forma definitiva aunque aún queda por pagar un plazo de la operación.

Los tres refuerzos restantes tienen un corte más defensivo. El primero fue el de ‘Espinho’ que llegaba del Ludogorets tras quedar libre. Con él, el Málaga CF refuerza el centro del campo con un hombre equilibrado que puede ser utilizado por Javi Gracia como comodín. Ahora, tras la marcha de Darder tiene más posibilidades de jugar, aunque Recio, Camacho y Tissone parecen estar por delante del portugués. Otro que venía de Portugal, aunque es español, es Juan Carlos, que tras su paso por el Granada fichó por el Sporting de Braga. Llega al conjunto malagueño en calidad de cedido y aporta la polivalencia necesaria para cubrir el lateral izquierdo y el interior de la misma banda,

Juan Carlos en el día de su presentación

Finalmente, en la línea defensiva, el principal refuerzo ha sido el de Albentosa, que ya ha sustituido a Weligton en los dos encuentros que se han disputado de Liga BBVA. El central llega cedido por el Derby County, equipo en el que recaló tras su paso por el Eibar. Aporta altura y contundencia, además de conocimientos de la liga española. Los problemas en la espalda de Flavio y el bajo nivel de Filipenko obligaron al club a buscar otro recambio en la zaga.

El mercado en cifras económicas

Si hay algo de lo que se habla constantemente en el mercado de fichajes es de cantidades económicas. La situación del Málaga CF en este ámbito no es la mejor y por ello se pensó en la venta del club en el mes de julio. Este pensamiento generó una división en la afición entre los que sí estaban de acuerdo y los que se oponían totalmente. Todos pensaban que la mejora económica de la institución era necesaria, pero con los traspasos que se estaban produciendo se creía que la solución era más que suficiente.

No todos los ingresos por ventas se han quedado en el Málaga CF

Sin embargo, gran parte de los ingresos que ha generado el equipo blanquiazul no han quedado en sus arcas, sino que el fondo de inversión venezolano que rescató al equipo, las cláusulas con otras entidades o los acuerdos a los que se llegó en el momento de fichar a algún jugador han disminuido los beneficios producidos por estas ventas. No obstante, el Málaga CF puede decir que ha salido airoso de este mercado de fichajes y, aunque se ha deshecho de grandes jugadores, ha conseguido ingresar dinero y adquirir futbolistas de rendimiento inmediato o con visión de futuro.

En lo referente a las salidas, la venta de ‘los Samus‘ al Villarreal ha sido la principal fuente de ingresos. Por ambos se adquirió 16 millones de euros, aunque solo once permanecieron en la entidad. Después está la venta de Sergi Darder, que aunque está valorada en 12 millones algo menos de la mitad ha sido para el Málaga CF, ya que el Espanyol, equipo del que venía el centrocampista, también se ha llevado una parte. Sí se han ingresado los siete millones que pagó el Southampton por Juanmi, por lo que esta ha podido ser una de las negociaciones más beneficiosas para el equipo de La Rosaleda. La última adquisición económica ha sido la de Portillo, que dejó un millón. Así pues, Sergio Sánchez, con la finalización de su contrato, Bobley Anderson, con la rescisión y Rescaldani, con la cesión, son las únicas ventas que no han dejado buen fruto a la entidad.

Estos beneficios, comparados con los gastos, dejan un balance positivo en la entidad, pues estos últimos no superan los seis millones de euros, siendo el primer plazo de la compra de Amrabat la cantidad monetaria más alta de la que el Málaga CF se ha tenido que desprender. Las cesiones y la llegada de algún jugador libre han aligerado los gastos, aunque el punto negativo es que el verano que viene gran parte de la plantilla acabará el contrato y deberá dejar la institución.