La segunda victoria consecutiva malagueña no fueron tres puntos cualquiera. El buen juego, la seriedad defensiva y la creatividad ofensiva que mostraron los de Javi Gracia dejaron más que satisfechos a los aficionados boquerones, que convirtieron el partido en una fiesta en La Rosaleda.

El Málaga CF volvió a sacar a relucir una de sus más preciadas virtudes: la intensidad. La batalla del centro del campo fue ganada por los blanquiazules, que acompañaron las ganas con el acierto. Dicha intensidad es la causante de que el equipo de Martiricos termine muy pocos partidos sin ningún futbolista amonestado por el árbitro. De las diez faltas que cometieron los locales, tres fueron merecedoras de tarjeta amarilla según el criterio de Martínez Munuera.

El primer futbolista del Málaga CF que vio la cartulina fue José Recio. El canterano malagueño la vio en el minuto 29 (cuando el marcador ya era de 2-0) por una falta sobre Víctor Rodríguez. El centrocampista defensivo llevaba apercibido desde la 19a jornada en la que vio la novena cartulina amarilla en Las Palmas, y, tras aguantar tres partidos sin ser pintado de amarillo, la décima amonestación es ya una realidad, por lo que Recio tendrá que descansar en la próxima jornada en la que el Málaga CF visitará al Villarreal CF.

Nada más empezar la segunda mitad, el hombre del partido, Juanpi Añor, se convirtió en el segundo jugador blanquiazul amonestado por Martínez Munuera debido a una acción en la que se desentendió del balón agarrando a un rival. La vista ante el Getafe CF es la tercera cartulina amarilla en la cuenta del venezolano, y, por consiguiente, se encuentra a dos de la sanción.

Ricardo Horta, que jugó toda la segunda mitad en sustitución de Atsu, fue amonestado en la fase final de partido, en el minuto 82, cuando realizó una fea falta a Álvaro Vázquez y Martínez Munuera no dudó en advertirle en forma de cartulina amarilla. El portugués se estrenó en el capítulo de las amonestaciones, por lo que tendrá ninguna consecuencia negativa para el equipo la tarjeta amarilla que vio.