El Málaga consiguió una victoria importantísima en el día de ayer. Se impuso por cero a uno gracias a un gol de Camacho en el minuto 82, suficiente para vencer al Real Betis en el Benito Villamarín en un duelo muy trabajado. Gracias a esta victoria, la permanencia está a punto de caramelo para sellarla matemáticamente, pero lo realmente ilusionante, es que estos tres punto colocan a los blanquiazules a seis puntos de la Europa League.

A falta de que dispute su encuentro el Celta de Vigo, que actualmente ocupa la séptima plaza, el Málaga ya está al acecho y con todos los encuentros contra los grandes efectuados, excepto frente al Athletic de Bilbao. Así mismo, aleja a un rival directo, el Betis, que estaba a dos puntos antes del pitido inicial y ahora la distancia es de cinco. Los deberes se están haciendo en la segunda vuelta, pero más que salvar los muebles están remodelando toda la casa.

Esquema cantado

El esquema inicial que propuso Javi Gracia era de esperar. Tras muchas jornadas de experimentos y distintas alineaciones, el técnico navarro ha encontrado su once de gala, uno que funciona como un engranaje y que se complementa en todas las líneas.

Los primeros compases del juego evidenciarion un choque entre dos equipos muy parejos en el aspecto táctico, lo que propició un duelo con falta de ritmo aunque con explosiones en ciertos momentos que devolvían la intensidad al espectador. Las más claras para los costasoleños en la primera mitad a punto llegaron de los pies de Albetonsa y Charles, dos internadas de Juanpi por la derecha.

El venezolano volvió a ser uno de los destacados en el cuadro blanquiazul, y  de no ser por las milagrosas intervenciones de Antonio Adán, la primera parte hubiera tenido otro color. El 4-4-2 por excelencia en los malacitanos hizo estragos en los locales, aunque no por mucho tiempo. Tras un impás de pasividad y aletargamiento, la segunda mitad, Merino supo contrarrestar la banda de Juanpi obligándole a descolgarse de los centrocampistas y llegaron los mejores minutos del Betis.

Trivote con Fornals para dominar el balón

Ya en la segunda mitad, Javi Gracia reformuló la colocación de sus jugadores, eliminando a un poco expeditivo Cop e introduciendo a tercer centrocampista en la medular para intentar arrebatar la posesión al Betis y desde el control, iniciar la jugada y conseguir la victoria.

Fornals y Juankar entraron por Cop y Castro, configurando un 4-5-1 con el canterano formando un trivote con Camacho y dejado más espacio por las bandas para abrir el juego. Con este movimiento, el partido retornó al estado principal, mucho juego en la medular y un ejercicio de contención por parte de ambos conjuntos. Sin embargo, los locales fueron despegándose poco a poco y encontraron sus mejores minutos de cara al último cuarto de partido.

Entonces cobró importancia el balón parado. La ligera superioridad verdiblanca se vio frenada por las intervenciones de Ochoa y por las faltas que provocaban inteligentemente los malagueños. En una de ellas, Camacho la peinó a la red ante la mala salida de Adán, consiguiendo la victoria en el mejor momento de su rival. A partir de ese momento, el trivote se juntó más y las bandas se vinieron al centro para tratar de aguantar el resultado y salir a la contra a por el segundo. Charles se buscaba la vida en solitario y en el 91 salió Atsu aunque ya no se movería el resultado final.

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Sobre el autor
Manu Jiménez
Decidí ser periodista porque me gusta escribir, informar a la sociedad y me apasiona hacerlo a la vez.