Los sueños están para cumplirse, no sólo para ser imaginados. Esta era la máxima del Mallorca antes de la 38ª jornada de la Liga BBVA. Con un pie en Segunda División hace unas jornadas, el Mallorca llegaba a la última jornada con opciones de conseguir la permanencia. Para ello, debían cumplirse una serie de condiciones, siempre pocas cuando se sueña con fuerza, como lo ha hecho el Mallorca. El conjunto balear cumplió venciendo al Valladolid (4-2), pero el Celta hizo lo propio con el Espanyol (1-0), mandando al equipo mallorquín a la Liga Adelante, tras 16 años soñando despierto.

El Mallorca hizo su trabajo

El Mallorca necesitaba la victoria para seguir confiando en el milagro. Y así salieron al terreno de juego los jugadores mallorquinistas. Desde el primer minuto, el conjunto dirigido por Manzano tomó la iniciativa, inquietando al portero pucelano Jaime. El empuje inicial del Mallorca, con ocasiones de Alfaro, Casadesús y Márquez, conllevó el primer gol. En el minuto 17, Casadesús encontró entre líneas a Alfaro, que batió por debajo de las piernas a Jaime. 

Pese al dominio mallorquinista en la primera mitad, el Valladolid, sin nada en juego, conseguiría empatar por medio de Bueno (30'). El exjugador del Real Madrid se encontró un rechace de Aouate a tiro de Omar para anotar el gol del empate. El gol visitante no acobardó al Mallorca, que siguió dominando y buscando la portería de Jaime, por medio de Bigas y Nunes, obligando al portero a exprimirse. Así, llegó el segundo gol del Mallorca. Al borde del descanso, Martí definió a la perfección desde la frontal, haciendo imposible la estirada de Jaime y llevando la ilusión de nuevo a la grada (43').

Tras el descanso, el Valladolid se hizo con un mayor dominio, hasta que apareció Giovani. Protagonista de la semana por su citación con la selección mexicana, el delantero del Mallorca culminó con un disparo cruzado una buena jugada personal desde prácticamente el centro del campo (57'). Con el Valladolid asimilando el golpe, Javi Márquez anotó desde la frontal el cuarto (68'). El Valladolid maquilló, a través de Omar Ramos, el marcador (72').

Entonces, el encuentro perdió todo su interés. Jugadores y aficionados pusieron los dos ojos a más de mil kilómetros de distancia. En Vigo radicaba el interés de todos los presentes en el Iberostar Estadio, hinchas acérrimos del Espanyol. Un gol del conjunto catalán salvaba al Mallorca y descendía al Celta. Sin embargo, la hinchada mallorquinista se cansó de esperar un tanto que sólo llegaría de forma ilegal, hundiendo la esperanza mallorquinista y llevando las lágrimas a la ciudad balear.

Fin a 16 años de gloria

El Mallorca pone, pese a la victoria, fin a 16 años consecutivos en Primera División. El equipo bermellón cierra un ciclo iniciado en 1997, cuando se despidió por última vez de segunda división. Una Segunda División a la que retornará acompañando a Zaragoza y Deportivo. Mallorca, Zaragoza y Deportivo lloran el descenso de sus equipos, lo que contrasta con la alegría de Vigo, que disfrutará un año más del mejor fútbol de España.