Ferrán Corominas y Tobias Henneböle han dejado de pertenecer al Mallorca con efecto inmediato tras pasar una temporada entera en la isla. El rendimiento de ambos jugadores ha estado lejos de contentar a Fernando Vázquez, que ha acabado por no contar con ellos. El gallego les ha comunicado que no van a tener hueco en el proyecto y por ello han tenido que abandonar el Club.

Tanto el alemán como Coro llegaron al conjunto bermellón a principio de temporada. El primero lo hizo a modo de prueba y condicionado por el que entonces era presidente de la entidad Utz Claassen. Chapi Ferrer aceptó su incorporación, aunque no jugó más que un único partido en toda la temporada. El rendimiento del teutón ante el Alcorcón resultó ser muy mejorable y demostró no estar preparado para dar el salto a la Segunda División. Finalmente fue relegado al banquillo e incluso dejó de entrar en las convocatorias de Vázquez.

Fuente: RCD Mallorca

Ferrán Corominas aterrizó en la disciplina balear procedente del Elche. Su buen hacer en temporadas anteriores resultaba atractivo para los insulares. No obstante, las dificultades del equipo en facetas ofensivas le señalaron como uno de los culpables de la escasez de gol. Su fragilidad de cara a la portería contraria así como la escasa participación en el juego lo relegaron al banquillo. En el mercado invernal se esfumaron todas sus posibilidades de volver a la titularidad debido a las incorporaciones de Ortuño, Lago Junior, Salomao y Óscar Díaz.

Ambas partes, tanto el Club como los jugadores, han acordado la rescisión de sus contratos. El Mallorca dispondrá, por tanto, de hueco en la plantilla para nuevas incorporaciones. Urge fichar a un delantero de garantías y para ello son necesarias las salidas de ambos jugadores. El Club apuesta por una plantilla corta que esté formada por jugadores comprometidos con el proyecto, idea en la que ni el alemán ni el catalán encajan.