"Es la primera alineación que hemos hecho y, excepto un jugador, los demás estaban la temporada pasada [en el Nàstic]. Lo he dicho muchas veces, que teníamos jugadores en Segunda B que perfectamente podrían estar en Segunda A", decía Vicente Moreno en la rueda de prensa posterior al Nàstic 2-2 Albacete. Y al técnico valenciano no le falta razón alguna, al menos en el dato que dio: ayer el Nàstic volvió a Segunda con diez futbolistas de la plantilla que consiguió el ascenso y un solo fichaje, Álex López.
El míster grana presentó un once titular que no era el que se esperaba -por ejemplo, Xisco Campos cayó de la convocatoria después de haber tenido molestias durante la semana. También quedó fuera el israelí Gal Arel, jugando Manolo en su lugar. El caso es que finalmente los granas acabaron jugando con diez futbolistas artífices del ascenso a la Liga Adelante. Comenzando por la portería, donde Manolo Reina se ha convertido ya en un fijo.
La defensa no fue menos. Gerard Valentín volvió a ocupar el lateral derecho de la zaga, un lugar que hacía bastante que no pisaba en liga, después de la lesión que lo mantuvo apartado la temporada pasada. En el otro lateral jugó Mossa, también comenzando su segunda temporada como jugador grana. La pareja de centrales fue la formada por Xavi Molina -además de La Canonja, Tarragona- y Pablo Marí. En el centro del campo David Rocha como capitán y emblema y Manolo Martínez, ambos más que conocidos por la afición tarraconense.
Los extremos fueron para Jean Luc y Ferran Giner, ambos comenzado su tercera temporada en el Gimnàstic. El canario Rayco -pichichi del equipo de Moreno la pasada temporada- acompañaba en la zona más adelantada a Álex López de Groot, la única nota despuntante, pues el delantero catalán fue el único jugador del once titular fichado por el Nàstic en este mercado de verano. Aun así, parece que el ex del Mestalla y del Reus Deportiu aprovechó bien la pretemporada, pues en todo momento demostró buena sintonía en el césped con sus compañeros.