Dos equipos de la zona alta, Córdoba CF y Nàstic de Tarragona, se citaron a partir de las seis de la tarde en el Nuevo Arcángel, un estadio que nunca se le había dado bien al equipo catalán. Y las cosas no cambiaron en esta temporada, la del retorno del Nàstic a la Segunda División. Si bien es verdad que los visitantes tuvieron mucha más posesión y alguna ocasión para marcar, el Córdoba aportó el peligro y los dos goles: más que suficiente para dormir en la primera posición de la clasificación.

Fidel señaló el camino

Cuando se cumplía el quinto minuto de juego en el Nuevo Arcángel, llegó el primer gol. El equipo de Oltra tenía a su disposición un saque de banda, a la derecha de su ataque, del que sacó petróleo: el balón llegó centrado hasta el punto de penalti, donde botó desconcertando a toda la defensa catalana. El más listo fue Fidel, quien recogió el balón y batió a Reina por el palo corto.

En el 5' el Córdoba ya mandaba en el marcador Con el gol a su favor, el Córdoba encontró el guión perfecto. Cedió la posesión al Nàstic, que se hizo el dueño del esférico. Eso sí, los granas se mostraron inoperantes en ataque, pues los jugadores más ofensivos del conjunto tarraconense apenas tocaron balón. Una de las pocas llegadas peligrosas tuvo lugar en el 15’: fue un centro de Mossa desde la banda izquierda que fue atrapado sin problemas por Razak. Los andaluces respondieron tres minutos más tarde con un centro de Fidel al segundo palo, donde nadie remató.

Efectividad, con efe de Florin

El Nàstic, de forma muy aislada, consiguió materializar su posesión en ocasiones. Era el 22 cuando Naranjo, desde la línea de fondo, centró al área pequeña, donde se tiró sin problemas Razak para cortar la trayectoria de la esférica. Tuvieron que pasar ni más ni menos que trece minutos más para que hubiese otra llegada con cierto peligro, pero, siguiendo la norma del partido acabó en nada: era una falta lateral que acabó anulada porque el local Florin hizo falta en ataque.

Florin Andone, ex del Atlético Baleares, superó a Marí para marcar el 2-0. (Imagen: LaLiga).

Pero al Córdoba le hizo falta muy poco para marcar de nuevo. En el 36’ el conjunto andaluz volvió a tirar de efectividad, y marcó ‘la otra efe’ del equipo, un ex del Atlético Baleares que ya había jugado antes contra el Nàstic: Florin Andone. Balón en largo desde campo propio que no pudo cortar Iago Bouzón haciendo que Florin se quedase cara a cara con Reina, ya que Marí tampoco consiguió cortar la jugada. El rumano no falló y batió al portero grana para hacer el segundo gol del partido.

Cambios con efecto a medias

Tras el paso por los vestuarios, Moreno no tardó en hacer unos cambios que cambiaron el partido, pero no el marcador. Entraron Emaná, Xisco Muñoz y Marcos en un periodo de tiempo corto, y consiguieron revolucionar el partido. Antes de que estos jugadores entrasen, Naranjo había chutado una falta a las manos de Razak (47’) y pocos segundos después Rayco giró sobre sí mismo y buscó una suerte que no encontró.

Los locales, como en la primera parte, prefirieron ceder el balón y buscar el gol en sus ocasiones contadas. Por ejemplo en el 54’, cuando Pedro Ríos, desde unos 25 metros, chutó fuerte obligando a Reina a reaccionar. Seis minutos más tarde, Tejera sacó un córner a la derecha de la portería defendida por Razak que fue rematado peligrosamente por Pablo Marí. El balón llevaba la trayectoria local, pero un zaguero cordobés despejó en balón con el cuerpo.

El Nàstic tuvo más posesión, pero no materializó. (Imagen: LaLiga).

En estos minutos de buen juego y también peligro catalán, el Córdoba también dijo la suya. Markovic superó la marca de Pablo Marí con un bello sombrero y cuando se plantó en la frontal hizo un fuerte chut que Reina despejó a córner (62’). En el 69’ Marcos, que acaba de entrar al terreno de juego, vio la incorporación en ataque de Calavera y le cedió el balón. Pero Razak fue hábil e interceptó el esférico.

Punto de inflexión

Sin duda la ocasión más clara del partido hasta el momento llegó en el ecuador de la segunda mitad y supuso un punto de inflexión: Marcos, desde la línea de fondo y sin ángulo para chutar cedió el balón a Xisco Muñoz, quien estaba solo, con la portería prácticamente vacía y en el área pequeña. Pero, incomprensiblemente para la afición grana, Xisco mandó el balón fuera (70'). Fue la ocasión más clara para los catalanes, y pudo haber sido el gol que devolviese la emoción al partido, pero no fue así y a partir de ese momento el encuentro volvió a decaer.

Desesperadamente, en el 78', Rocha buscó el gol con un chut desde la frontal que se marchó por la línea de fondo rozando el palo derecho de la portería de Razak. Más clara aún fue la oportunidad que tuvo Markovic en el 89' para hacer el 3-0: chutó desde la frontal y el balón topó con el travesaño, en la que fue la última ocasión del partido.