Con las uvas todavía en la garganta. Así han llegado los jugadores rojillos esta mañana al entrenamiento. Tras volver de las vacaciones invernales el pasado lunes, Javi Gracia no quiere perder ni una sola sesión en vistas del exigente mes de enero que le espera al conjunto navarro. Si bien el técnico pamplonica ha tenido el detalle de retrasar hasta las 12.00h el entrenamiento que estaba previsto para las 10.30h, la plantilla osasunista al completo se ha ejercitado esta mañana en las instalaciones de Tajonar.

Osasuna jugará en enero un mínimo de seis partidos; ocho si pasan de ronda en Copa.

Y es que, los rojillos jugarán este mes un mínimo de seis partidos, empezando el domingo frente al Espanyol y terminando el fin de semana del 25 al 26 recibiendo la visita del Athletic de Bilbao. Entre medias, Betis, Granada y los dos partidos de Copa ante el Real Madrid —que de superar la eliminatoria se ampliarían a ocho los compromisos de los navarros en enero—. Muchos minutos por disputarse, mucho en juego y pocos delanteros.

Ariel Núñez: en el limbo

Tras ser uno de los máximos goleadores de la pretemporada y disputar como titular los dos primeros partidos de Liga, la estrella del menudo delantero paraguayo se ha ido apagando con el paso de las jornadas hasta acabar desterrada al ostracismo absoluto. La gota que colmó el vaso y que sentenció definitivamente al jugador guaraní fue caerse de la lista en el último encuentro de Copa del Rey, un torneo destinado a dar minutos a los menos habituales. Con este panorama, los medios no tardaron en empezar a cuestionarse la continuidad de Núñez —que apenas lleva cinco meses en Pamplona tras llegar el pasado verano en calidad de cedido por el Libertad de Asunción—, a pesar de las palabras de ánimo que le dedicó Pedja Vasiljevic, director deportivo del club. "Tengo confianza plena en él", dijo el secretario técnico balcánico en una entrevista concedida al diario Noticias de Navarra en noviembre.

No obstante, las teorías de la prensa especializada no parecían ir del todo desencaminadas y el pasado 23 de diciembre, en la tradicional comida navideña de la directiva con los medios de comunicación, Miguel Archanco, presidente de Osasuna, acabó por darles la razón de forma muy contundente. "Con Ariel y el Libertad hemos llegado a un acuerdo. El jugador deja el club y vendrá a Pamplona el 4 o el 5 de enero a despedirse de los compañeros y a firmar algún documento". Sin previo aviso, el paraguayo quedaba oficiosamente desvinculado de Osasuna e, incluso, el máximo dirigente rojillo se permitió la licencia de avanzar algunas de las cifras de la negociación. "Tanto el jugador como el Libertad se han portado francamente bien. El Libertad ha renunciado a lo que tenía que cobrar ahora de la cesión (unos 140.000 euros) y el jugador ha atendido nuestra propuesta".

La desvinculación definitiva de Ariel cuando se tramite la documentación.

Sin embargo, los días pasan y la operación sigue sin confirmarse de forma oficial por ninguna de las tres partes. Para más inri, el delantero, a falta de firmar su finiquito, acudió el pasado lunes a Tajonar para entrenarse con total normalidad con el resto de sus compañeros. En cualquier caso, todo parece indicar que es cuestión de horas que Núñez deje Pamplona y desde el club han asegurado que únicamente seguirá entrenándose con el equipo hasta que se resuelvan todos los trámites de su documentación y se desvincule definitivamente de la entidad. El motivo es que la dirección deportiva no quiere que el futbolista deje de entrenarse durante este parón burocrático y pueda verse perjudicado en el ámbito deportivo. Según medios paraguayos, este retraso se debe a que el jugador quiere cobrar lo que queda de su contrato —unos 120.000 euros— antes de dejar el club y buscar otro en el que seguir jugando, para lo que podría tener ofertas de México.

La delantera en cuadro

Cuando se le preguntó por Ariel, Archanco respondió sin tapujos. "Apenas ha participado en Osasuna. Si no hubiese estado en la plantilla no lo hubiésemos notado porque no ha jugado" —convirtiéndose así en uno de los hijos del olvido de Martín González—. No obstante, Javi Gracia no parece estar del todo de acuerdo con las valoraciones de su presidente. A pesar de no gozar de la confianza del técnico, Núñez era, inevitablemente, el tercer delantero de la plantilla y la ausencia de uno de sus compañeros en punta de ataque triplicaban sus opciones de jugar. Afortunadamente para Osasuna, Oriol Riera, titular indiscutible en punta de ataque, no solo está en racha —incluso anotó uno de los cuatro goles de la selección catalana el pasado lunes—, sino que las lesiones parecen estar respetando al delantero de Vic.

Manu Onwu ha jugado 12 de los 17 partidos de Liga, pero todos ellos saliendo desde el banquillo.

Sin embargo, esta posibilidad —baja de Oriol Riera— asusta y mucho a la parroquia rojilla, que ya vio como contra el Valladolid Javi Gracia tuvo que hacer malabarismos para completar el once al no contar confiar en Ariel y Manu Onwu —el falso nueve acabó siendo la opción elegida—. Pues el valtierrano tampoco parece ser del agrado del técnico navarro. A pesar de haberse establecido como el jugador número 12 —ha jugado 12 de los 17 partidos de liga disputados, todos ellos entrando desde el banquillo—, Manu no ha sabido aprovechar las oportunidades que el técnico le ha brindado, especialmente en Copa. El canterano ha sido titular en los dos partidos de la eliminatoria ante el Málaga y, a pesar de conseguir anotar en el partido de ida, no dejó buenas sensaciones, viéndose superado en todo momento por la defensa andaluza. Javi Gracia no se fía de dejarle al tudelano la responsabilidad de cargar con los goles del equipo, pero una nueva posibilidad se está abriendo en los últimos días.

Nino a la espera del alta médica

Poco antes de la llegada de Ariel a Osasuna, a finales del mes de julio, un grave contratiempo azotaba a la delantera rojilla. El veterano punta almeriense Nino, en un choque fortuito durante un entrenamiento, se rompía el ligamento cruzado anterior de su rodilla derecha, una lesión que iba a tenerle apartado de los terrenos de juego, al menos, durante la primera vuelta de la Liga. Precisamente, este incidente frenó la salida de Manu Onwu —que ya tenía la maleta preparada para marcharse a Girona— y aceleró la contratación del paraguayo.

Hoy, cuando están a punto de cumplirse seis meses desde su operación, Nino ya se entrena con normalidad junto al resto de sus compañeros a la espera del alta médica. No obstante, su participación en lo que resta de campaña no está asegurada, ni siquiera tras la marcha de Ariel. Con 33 años, solo media temporada de contrato y recién salido de una lesión de larga duración, la dirección técnica no encuentra en el almeriense la solución ideal para los problemas en ataque rojillos, más, cuando en sus dos primeras temporadas en Pamplona, el punta de Vera se ha quedado muy lejos de los registros goleadores que se esperaban de un ariete con su trayectoria —6 y 3—.

A punto de recibir el alta médica, Nino tiene muy complicado tener fichar para lo que resta de temporada.

En cualquier caso, hacerle ficha es una opción, aunque parece poco posible. "Tenemos todo el mes de enero para tomar una decisión, pero es más probable que no se le haga", han reconocido fuentes del club al portal Navarrasport. Por supuesto, en el caso de que Osasuna decidiera no contar con él, el club rojillo debería afrontar la resolución de su contrato, que concluye en junio. Lo único seguro es que, mientras la dirección deportiva y la directiva deciden que hacer, Javi Gracia tiene muy poco con lo que tirar para este vertiginoso mes de enero.

Al mercado con cautela

Con tan solo dos delanteros en nómina, el técnico rojillo lleva varias semanas lanzando mensajes de auxilio a sus superiores. «Creo que nuestra capacidad realizadora demuestra que a día de hoy somos el equipo con menos gol. Por lo tanto, dentro de las posibilidades del club, me gustaría poder reforzar el equipo con algún jugador de esas características. Presidente y Dirección Deportiva ya están al tanto de las necesidades del equipo», aseguró Gracia hace varias jornadas en rueda de prensa.

Sobre ello habló Archanco, precisamente tras anunciar la marcha de Ariel. "Yo creo que esta plantilla es de absoluta solvencia. Estáis viendo cómo juega. Se han incorporado jugadores de casa que estaban un poco olvidados y ahora son protagonistas muy válidos y de primer nivel. Eso se debe al entrenador y habrá que atender lo que él nos diga, porque su éxito es nuestro éxito y el nuestro es el suyo". No obstante, el presidente rojillo se muestra cauto a la hora de salir al mercado en busca de nuevas incorporaciones. "Nuestro gasto tiene que ser comedido, pero no se puede controlar el gasto a un nivel de riesgo. Los fichajes dependerán del mercado y de los técnicos. Javi siempre ha dicho que no hay que traer para llenar huecos".

En definitiva, Osasuna tiene un mes para solucionar sus problemas con la delantera. Tras la baja de Ariel, las opciones pasan por hacer ficha a Nino —dejando una situación muy similar a la que se tenía hasta el momento— o intentar la incorporación de algún jugador hasta final de temporada, siempre, en calidad de cedido. Habrá que ver que pasa, aunque el mejor regalo de Reyes sería que Oriol Riera continuara con su racha.