Cuánto han cambiado las cosas desde el último Mallorca - Osasuna en Segunda División. Sin ninguna duda, el partido entre baleares y navarros se convirtió en uno de los clásicos de Primera. Este sábado, en el antiguo Son Moix (actual Iberostar Estadi), se enfrentan dos históricos que pasan por sus horas más bajas. El Mallorca, decimoquinto, mira de reojo al descenso, del que le separan tres puntos. Osasuna, por su parte, saca dos puntos de ventaja a los mallorquines.

Años después, Osasuna  y Mallorca volvían a reencontrarse en la categoría de plata. La victoria se la llevarían los navarros tras una heroica remontada con el resultado final de 6-4. El Mallorca, desde entonces, ha deambulado por la competición con altibajos, realizando grandes partidos y fallando en aquellos que se consideran ‘fáciles’.

En los últimos cinco encuentros, el Mallorca no ha conseguido mas que una victoria y, en lo que va de temporada, solo ha logrado enlazar dos victorias consecutivas. Uno de los puntos débiles del conjunto balear es la defensa y la facilidad para encajar gol. A pesar de ir en decimoquinta posición, son el cuarto equipo más goleado de la categoría, con 37 goles en contra. Además, no han conseguido convertirse en un equipo sólido en su estadio, donde han dejado escapar 19 puntos (los mismos que han logrado en casa).

Su gran figura, pretendido por los grandes equipos y que es actual jugador del Real Madrid, es Marcos Asensio. A pesar de ser la estrella, el pasado encuentro frente al Recreativo de Huelva era expulsado por doble amarilla y no podrá jugar este sábado. Una baja que, sin duda, será sensible para el juego de su equipo. El joven es el encargado de dirigir un equipo donde Scepovic y Arana son los encargados de ejecutar. Con seis tantos cada uno, buscarán dejar más hundido aún al Club Atlético Osasuna.

La dinámica que había cogido el equipo no era la mejor y por ello la Junta decidió que Nanu Soler debía ser el nuevo entrenador del conjunto. La semana pasada se estrenaba con empate y seguro que quiere debutar frente a su afición con una victoria.