Los acontecimientos se precipitaron el pasado sábado en Pamplona. Justo cuando Muñoz Mayordomo pitó el final en el Sadar, empezó el partido para José Manuel Mateo y sus pupilos. El filial rojillo visitó el campo del Oberena, equipo revelación en el grupo XV de la Tercera División, y consiguió tres puntos de oro en el tramo final con un gol de Josetxo Cariñanos.

Casi sin tiempo para disfrutar de la victoria, que permitía regresar a los playoff de ascenso, la Junta Directiva comunicó que Jan Urban había sido destituido y el hasta entonces míster de Osasuna Promesas se haría cargo del primer equipo. Desde ese momento, como ha demostrado esta mañana, cogió al toro por los cuernos y analizó la derrota rojilla ante el Lugo: "El equipo está sin chispa, muy largo y con poca movilidad. Necesita ser más positivo". Por este motivo quiere tomarse un periodo para estudiar todo bien y escuchar a los jugadores. "Tengo claro qué es lo que quiero, pero el martes tendré una charla profunda con la plantilla de cara a buscar soluciones", ha apuntado Mateo.

Mateo es consciente de que afronta el reto más complicado de toda su carrera profesional, pero se siente con fuerzas para sacar al equipo adelante. "Sé que la viabilidad del club pasa por lo deportivo, nos jugamos mucho", ha manifestado el ya entrenador rojillo. Para su antecesor solo ha tenido buenas palabras y ha confesado que se han encontrado en el pasillo de Tajonar donde el polaco le ha deseado suerte: "Le he dicho que ha sido un placer trabajar con él y con Kibu durante todo este tiempo. Yo también les quiero desear toda la suerte". En esta nueva aventura Mateo contará con Miguel Ángel Fernández, como segundo entrenador, y Juantxo Martín, encargado de la preparación física.

Mateo se ha definido como un técnico "con mucha personalidad, al que le gusta el rigor táctico, la agresividad y el atrevimiento"

Tras entrenar al juvenil de Osasuna hace dos temporadas y al filial del Alavés el pasado curso, Mateo relevó a Javi Lerga en verano como técnico de Osasuna Promesas. A pesar de su corta experiencia como técnico, el navarro se ha definido como "un entrenador de mucha personalidad y al que le gusta el rigor táctico, la agresividad y el atrevimiento". En un tono más distendido ha manifestado que "está de moda lo del partido a partido, pero yo digo entrenamiento a entrenamiento". Por otra parte ha asegurado que contará con la totalidad de jugadores de la plantilla y no ha querido olvidarse del filial. "Cuando me despedí de ellos les dije que si estoy aquí es gracias a ellos y que no me voy a olvidar", ha señalado el técnico.

La plantilla profesional guardará descanso el próximo lunes y será el martes 3 de marzo cuando vuelva a los entrenamientos con la mente puesta en el próximo compromiso. Tras cuatro derrotas consecutivas y muy cerca del descenso, los rojillos visitarán a un rival directo por la permanencia. La cita será el próximo sábado a las 18:15 horas en el Sardinero ante el Racing de Santander. En el encuentro disputado en El Sadar, los cántabros vencieron 0-2 con un doblete de Juanpe.

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Sobre el autor
Borja Bernarte
Periodista (deportivo) en potencia. Cantera de la Facultad de Comunicación de la Universidad de Navarra. Deportes en Diario de Navarra.