Sigue aumentando la lista de detenidos. Esta vez los protagonistas son miembros de la directiva anterior a la de Archanco. El presidente Patxi Izco, su vicepresidente Juan Pascual y el director de la Fundación Osasuna, Diego Manquirriain, han sido imputados en el 'caso Osasuna'. Estos tres exdirectivos han sido llamados ante el juez para tratar de conocer cuál ha sido el destino de los más de 2,4 millones de euros que salieron de las arcas rojillas sin determinar su paradero.

Después de las controvertidas declaraciones de Angel Vizcay, también detenido en la jornada del pasado jueves, y tras una profunda auditoria de las cuentas rojillas, se dieron a conocer las irregularidades en las arcas del club desde hace varias temporadas. Cabe destacar que, a diferencia de cómo se están interpretando en otros muchos medios, estas irregularidades y desvíos de capital no tienen por qué estar necesariamente ligadas a los supuestos amaños de partidos que el propio Vizcay destapó, y por los cuales la LFP ha presentado una querella criminal sobre particulares.

Por su parte el Club Atlético Osasuna se ha presentado como acusación particular tras denunciar hacer varias semanas la desaparición de un montante importante de dinero. Luis Sabalza, actual máximo mandatario de Osasuna, al ser preguntado por la situación ha respondido con un contundente: “No me hagáis preguntas porque lloro y me jode”. El presidente con gesto serio ha asegurado que la acusación particular por parte de los actuales directivos se ha adelantado “dadas las actuales circunstancias”, ya que, según estaba planeado, se debía aprobar en la asamblea extraordinaria de socios la próxima semana.