La temporada echa el telón y el destino ha querido que el Sabadell sea el último rival de Osasuna. Tras la victoria ante el Recreativo de Huelva y la derrota del Racing de Santander, la parroquia rojilla parece que ve la luz al final del tunel. En la Nova Creu Alta se decidirá el futuro de la entidad navarra a la que le basta con un empate para certificar su permanencia. Enfrente un cuadro arlequinado que consumó el descenso la pasada jornada tras caer en El Molinón y que tan solo se juega la dignidad ante su afición.

El Sabadell afrontará su último compromiso en la categoría de plata con tan solo 37 puntos gracias a sus ocho victorias y trece empates. Desde el 26 de abril, ante el Racing de Santander, no sabe lo que es ganar, algo que le ha condenado de cara a conseguir la salvación. El cuadro que actualmente dirige Juan Carlos Mandiá ha tenido una temporada muy irregular, con un inicio de campeonato aceptable pero un final de año 2014 e inicio de 2015 nefasto. De hecho, en todo este año tan solo ha conseguido la victoria en cuatro ocasiones y se enfrentará a Osasuna tras cosechar un punto de los últimos 18 en juego.

Al detalle

Aunque el Sabadell sea segundo en la clasificación de goles encajados y de los peores en anotados, Osasuna no debe confiarse en su visita a la Nova Creu Alta. El cuadro de Juan Carlos Mandiá cuenta en sus filas con jugadores ofensivos de la talla de Collantes (9 goles), Aníbal Zurdo (5), Kiko Femenía (3) Gato (3) o el mítico Raúl Tamudo (4). El ex internacional español tan solo acumula 466 minutos con la camiseta arlequinada, pero siempre es un peligro para cualquier guardameta rival.

Anibal Zurdo es el killer del Sabadell. Fotografía: Marca.

El Sabadell suele emplear un sistema bien definido como es el 1-4-1-4-1. Al acumular tantos jugadores detrás del delantero, el equipo se muestra muy vertical y eso es una amenaza para las defensas rivales. Anibal es el delantero al que todo el conjunto arlequinado le busca para que baje balones y, así, empezar segundas jugadas. Todo el hambre de victoria puede quedar mermado por la baja moral que atraviesa la plantilla tras el descenso en El Molinón de la pasada jornada. De todas formas, el cuadro de Enrique Martín Monreal no se debe confiar porque el Sabadell querrá acabar de forma digna la temporada y regalando una victoria balsámica a su afición.