Osasuna tenía ante sí una nueva oportunidad para seguir mejorando y para seguir encajando las piezas de un puzzle que, a pesar de que en los primeros amistosos parecían encajar a la perfección, contra el Real Unión empezaron a no encajar. Amistoso ante un equipo de categoría inferior -el Lleida milita en 2ªB- que sirvió para ampliar las dudas de un equipo que ha ido de más a menos esta pretemporada y en el partido ante los catalanes quedaron en evidencia las carencias de la plantilla. 

Y es que si por algo se estaban caracterizando los de Martín era por la seguridad defensiva que ofrecía durante sus encuentros. Sin embargo, en el minuto 10, Fuster se aprovechaba de un despiste de la zaga rojilla y anotaba un gran gol desde la frontal del área en una jugada de estrategia. El saque de esquina era un pase a la frontal del área donde Fuster controlaba a placer y con un zapatazo el balón se colaba pegado al palo izquierdo.

Tras el tanto que le servía a los catalanes para adelantarse, los de Martín reaccionaban y Tano se quedaba cerca del gol. El defensor remataba una falta lateral, aunque el cabezazo quedaba anulado por fuera de juego. En el minuto 22 Adrián Cruz se anticipaba a la defensa visitante y remataba a gol un córner sacado por Olavide. El atacante remataba a placer en el segundo palo y empujaba a la red el balón para poner el 1-1.

A penas 10 minutos después, el Lleida se volvería adelantar en el marcador tras una buena jugada por la banda que terminaba con un pase atrás para que Óscar Vega, que se adelantaba a la zaga rojilla, pusiera el 1-2 en el marcador. Una jugada más, las carencias defensivas de Osasuna quedaban al descubierto. La primera mitad avanzaba y eran los catalanes los que seguían intentándolo. Juan Pérez tenia que detener un disparo desde la frontal del área, y los navarros no daban sensación de remontar el encuentro, al menos en la primera mitad. La única parcela del campo donde los de Martín eran superiores eran las jugadas de estrategia, casi siempre rematadas por los rojillos. Sin embargo, la defensa era un ‘coladero’ y cada balón enviado a la espalda, significaba peligro para la portería de Juan. 

Tras la reanudación las cosas no mejoraron. Ekhi Senar, ex jugador rojillo, estrellaba su cabezazo en la madera tras una falta lateral. Aunque poco a poco las ocasiones locales se iban sucediendo. Primero Fernando Rubio, que al igual que Milic, debutaba con la zamarra rojilla, disponía de una gran ocasión tras una jugada de estrategia con Berenguer. Después iba a ser el propio Milic quien, con un remate muy poco ortodoxo, pusiera a prueba al guardameta Cobo a la salida de un córner. Pero la falta de acierto terminó condenando a Osasuna y beneficiando al Lleida, que se aprovecharía de los espacios de la defensa local para poner el 1-3, que a la postre sería definitivo. 

En los últimos 20 minutos a penas se vieron detalles. Una buena parada de Juan y poco más. Sensación de que hay muchas cosas por mejorar para ser un equipo competitivo en el inicio de temporada. Segunda derrota consecutiva, y segunda derrota consecutiva ante un 2ªB. El jueves el rival será el Zaragoza en la localidad navarra de Lerín.