Pamplona amanecía hoy blanca. La ciudad deportiva de Tajonar se veía con una capa de nieve encima del césped, hecho que ha imposibilitado que los jugadores del primer equipo pudieran realizar su sesión de entrenamiento. Martín ha decidido realizar una sesión en el gimnasio.

Después de la sesión matinal llegaba el turno de la rueda de prensa. Esta mañana ha sido el delantero Urko Vera quien se ha puesto delante del micrófono. Un Urko Vera que ha reconocido que tiene ganas de marcar un gol ya con la camiseta rojilla, pero que no le da vueltas al tema porque, según él, “el gol ya llegará. Hay que trabajar para ayudar al equipo”.

Al delantero se le ha preguntado sobre la sesión en el gimnasio y sobre el próximo rival, el Alavés. A lo primero ha respondido que “viene bien cambiar un poco y desconectar. Después del viaje de vuelta de Lugo no me encontraba muy bien y hoy necesitaba sudar un poco”.

Frente a lo que opina gran parte de la Segunda División, Urko Vera no cree que el Alavés sea un equipo violento, adjetivo con el que se le ha descrito al conjunto blanquiazul en las últimas semanas, sino que defiende que los equipos de Bordalás son intensos.

Es un entrenador que sabe elegir bien sus fichajes. Se trae jugadores que le conocen y que saben lo que él quiere. Es un buen entrenador y está haciendo una gran temporada. Le acabará llegando el premio de entrenar en Primera. Bordalás pide ir fuerte e intensidad y estoy de acuerdo con él en eso. Pero sus equipos no son leñeros”.

Por último, Urko Vera afirma que “si nosotros estamos al 200%, poco se van a llevar de aquí. A pesar de los últimos resultados, estamos bien y seguro que con sacrificio nos saldrán las cosas bien”.