Capaz de asociarse en la medular y organizar la salida de balón como de aparecer entre líneas para mandar pases en profundidad e incluso de pisar área rival para intentar definir de la mejor forma posible. Además, a pesar de llegar algo mermado al final de los encuentros, su entrega es total como se demuestra en defensa donde comparte con Koné, la primera línea de presión de este Racing. Calidad, visión y carácter para convertirse en un jugador fundamental en este equipo.

El guía hacia la portería

David Miguélez, un "visionario del espacio"

La primera y principal gran característica de Miguélez es su gran visión de juego. El asturiano mueve al equipo desde la zona de media punta, buscando el hueco, cortando la telaraña defensiva rival con sus pases largos, bien hacia la banda donde aparecen Iñaki y Concha o bien buscando la velocidad de Koné. Visionario del hueco, el asturiano no tiene miedo en intentarlo una y otra vez, y jugar en corto, confiando en cualquier compañero, siempre que no lo vea claro. De esta forma, Miguélez guía al Racing, es la brújula que señala el camino, que señala el norte, la meta, la portería rival.

Puede que se pase varios minutos sin ver el balón, sin entrar en juego, pero el asturiano tiene la capacidad para recoger balones entre líneas y crear fútbol ofensivo, ocasiones, llegadas… Marca el ritmo y el camino y hace que sus compañeros le sigan hasta el área rival o hasta el fin del mundo.

Capacidad de asociación

Además, el gijonés tiene una gran capacidad de asociación. El asturiano ayuda en la salida de balón a los hombres que forman el doble pivote. Ahora, Javi Soria y Fede San Emeterio ven como Miguélez llega desde la media punta para ayudar en la elaboración, en la construcción del juego. Comienza a dirigir los pasos racinguistas, timoneando el fútbol verdiblanco, enseñando el camino inicial para conseguir llegar al área rival.

Su amplitud de movimientos, en la zona de entre líneas, le permite además asociarse con cualquier compañero. Cae a banda para dejar a Concha con libertad por el centro, manejando entre los dos la nave verdiblanca, tocando, moviendo el juego, crean fútbol. También se asocia con Iñaki y Saúl para favorecer, mediante paredes y toque rápido, la salida del Racing por banda izquierda, allí donde la verticalidad, la velocidad y el nervio están muy presentes

Calidad individual

La calidad aporta más espacios y mayor pausa

A parte de esa calidad que posee Miguélez en la visión de fútbol, también tiene calidad individual. Esa que solo los genios pueden atesorar y que solo los futbolistas entregados pueden mantener y aprovechar. Regate, no demasiado rápido, pero sí eficaz. Movimientos que dejan sentados a sus rivales, con la cabeza levantada, engañando a su opositor para avanzar entre la línea defensiva rival. Esa calidad que hace jugar mejor a sus compañeros, con más huecos, con mayor margen de movimiento.

Además, esa calidad le permite dar la pausa necesaria en un partido, cuando al Racing le interesa jugar pausado, pensando, sin tanto ir y venir y sin tanto contragolpe. Un juego ideal a la hora de defender un buen resultado, de desesperar al equipo rival ávido de balón para intentar perforar la portería verdiblanca. Otra faceta que hace que el Racing sea mejor equipo cada día.

Pisando área

Los orígenes futbolísticos de Miguélez lo situaban más cerca del área, dentro del mismo, y no en la frontal o en la medular, zona de movimiento actual. Pero el asturiano no ha perdido esa llegada al área de antaño, cuando acostumbraba a hacer goles y también a dar asistencias desde la posición de nueve. Ahora, más como media punta o segundo delantero, su labor de enganche le permite llegar al área y hacer algún que otro gol, apareciendo desde la segunda fila.

El pasado año llegaba como delantero aunque pronto se vio que no iba a ser un ’9’ puro. A pesar de comenzar el año con pocos minutos, conseguía anotar cinco tantos, entre Liga y Copa, una buena cifra teniendo en cuenta eso, que no jugó demasiados partidos en la primera parte del año. En la presente temporada, anotó un gol ante Las Palmas que pudo suponer la victoria verdiblanca, pero la mala suerte en los minutos finales se llevó los puntos de Santander.

El balón parado y la capacidad defensiva

Miguélez es el encargado, junto con Iñaki, de poner en juego los balones parados. El guante que tiene en su pierna derecha ha sido aprovechado de gran forma por el Racing, sobre todo el año pasado. Aunque su irregularidad en este tipo de lanzamientos le ha apartado, en ocasiones, del balón parado en favor de Iñaki. Aun así, en los últimos tiempos Miguélez está mostrando mucha más regularidad a la hora de sacar faltas y córneres, sobre todo cerrados, como le gusta a Paco.

A pesar de no ser un jugador excesivamente correoso, la formación del Racing en defensa iguala en el campo a Koné y Miguélez, formando así la primera línea de presión. El asturiano hace la labor que le indica Paco con gusto y con ganas, presionando y apretando en la primera fase defensiva del Racing, por lo que se convierte así en un jugador importante tanto en defensa como en ataque.

En su debe: el físico

Prácticamente en todos los partidos jugados con el Racing, sobre todo en la presente temporada, el asturiano ha mostrado debilidad física en los últimos minutos. Paco es un hombre que acostumbra a hacer los cambios más o menos tarde pero Miguélez suele ser un habitual en esas sustituciones.

No jugó en Leganés, el día que el Racing mostró su peor cara

En la 2014/2015, el gijonés completó los 90 minutos en las derrotas racinguistas y, tras no jugar en Leganés, donde el equipo mostró la peor cara del año pese al empate, regresó a la titularidad para compartir y ser parte importante del éxito verdiblanco. En estos últimos partidos, el asturiano ha sido sustituido siempre, aunque dentro de los últimos quince minutos. Quizás su excesiva carga de trabajo en el partido, fisionomía o, por qué no, su forma de juego, más de calidad y poco correr que de sacrificarse físicamente, hace que Miguélez llegue más mermado que otros compañeros a los últimos compases de encuentro.

Por tanto, un centrocampista total para el Racing. Cumple muchas tareas y casi todas ellas muy provechosas para el conjunto verdiblanco. Una pieza fija para Paco, vital casi. El guía de este Racing, la brújula verdiblanca.