Las pruebas médicas han confirmado el peor de los pronósticos. Mamadou Koné sufre una rotura del ligamento cruzado anterior de su rodilla derecha y se perderá lo que resta de temporada. Tras quedarse fuera de la convocatoria en el pasado encuentro ante la UD Las Palmas, y tras arrastras problemas físicos desde el pasado mes de noviembre (en diciembre se perdió varios partidos), el Racing y el jugador recibió una de las peores noticias dadas las circustancias.

Y es que Koné es el jugador franquicia del Racing. Quizás no imprescindible pero sí uno de los fundamentales de Paco. Los resultados mandan y el Racing aún no ha logrado vencer sin el marfileño. En Miranda, sin ir más lejos, fue uno de los mejores, a pesar de fallar un penalti, y en la mejor época del Racing este año, entre octubre y noviembre, la actuación del africano fue fundamental.

Ahora, el delantero estará, como mínimo, seis meses de baja tras la operación y el Racing deberá buscar alternativas. Quique González y Mariano se antojan como los elegidos para sustituir al marfileño, bien formando pareja en ataque o eligiendo entre uno de los dos. El futuro del Racing depende de la permanencia y todo se oscurece con la baja del máximo goleador verdiblanco. 

La mala suerte vuelve a cebarse con el Racing que parece destinado a sufrir lo que no está escrito para lograr el objetivo y dejar al club con vida de cara al futuro. Un futuro incierto y lleno de contradicciones y problemas que parecen ir siempre a la contra.