La fe mueve montañas, y el racinguismo masas. El Racing ha disfrutado este año de desplazamientos de hinchas -que se cuentan por centenares o miles- allá donde han ido. Borja San Emeterio ha aprovechado una 'mini' entrevista para agradecer a la afición su entrega y calificarla como, sin duda, una de las mejores de la categoría.

Es de buen nacido el ser agradecido

Elogios, encomios y alabanzas. Ese es el resumen de la entrevista de Borja San Emeterio en el día de hoy. "La afición del Racing es envidiable y en esta categoría marca la diferencia", afirmaba el de Sierra de Ibio, consciente de la importancia que tiene la hinchada para este tipo de partidos con máxima presión.

El cántabro también ha hecho alusión a la polémica de las entradas, "aunque sea un viaje un poco largo y el precio de las entradas no favorezca", San Emeterio no tiene duda de que la afición responderá. Concluyó con unas palabras de optimismo y confianza de cara al trascendental choque del sábado a las 18 horas.

La venta de entradas, pese a toda la cola que trae el asunto, sigue a buen ritmo. Ayer se superaron las 500 y se espera que esa cifra aumente, por lo menos, hasta las 800. Una cantidad considerable de aficionados, si se tiene en cuenta la lejanía del destino y las pocas facilidades que han puesto los ferrolanos al conjunto verdiblanco.

La estrategia, punto del día

En el plano deportivo, cabe destacar que el conjunto cántabro ha entrenado a puerta cerrada en El Sardinero, para preparar las jugadas a balón parado y la estrategia. Al finalizar, los jugadores han completado el entrenamiento en la playa para realizar ejercicios regenerativos dentro del mar.

El único jugador que no ha entrenado -y que no entrará en la convocatoria- ha sido Francis, por sus molestias en el talón de Aquiles. Óscar y Dioni, tras cumplir sendas sanciones, estarán en A Malata para intentar traer los tres puntos a Santander, y una sonrisa de oreja a oreja a sus aficionados.