Rodri, defensa central del Rayo Vallecano, volvió a una convocatoria frente al Real Madrid tras una dura lesión en el tendón de Aquiles que le ha mantenido fuera de los terrenos de juego durante más de medio año.

Según las declaraciones que ha hecho a la web oficial del club,  Rodri se sintió "recompensado por poder ir al banquillo. Uno se viste de corto y puede ayudar al equipo más de cerca".

Han sido muchos meses de rehabilitación, dolor y sufrimiento físico hasta llegar a volver a una convocatoria. Las lesiones de rotura de ligamentos y tendones son las más temidas por los futbolistas y muchos de ellos vuelven a jugar de una forma distinta, temerosos de volver a pasar por lo mismo. Por las palabras del jugador, Rodri no es uno de esos jugadores: "No tengo ningún problema ni pienso en ello. Tras tanto tiempo el cuerpo tiene que habituarse y saber que todo va a ir bien. No hay que pensar en negativo para nada".

"Cuando uno tiene obstaculos en la vida, afrontar ese problema te hace más fuerte, aunque ojalá no hubiese pasado", comentaba el jugador sobre su sufrida experiencia personal, etapa en la que le ha tocado ver los partidos lejos del verde: "Se vive mal, no es lo mismo. Esperemos que pronto lo pueda vivir desde dentro del campo".