La alegría ha sido efímera para Antonio Amaya (Madrid, 1983). El central del Rayo Vallecano, que debutó con el equipo franjirrojo en Primera División el pasado viernes, se ha roto el cuarto dedo del pie izquierdo y estará fuera de los terrenos de juego un mínimo de 6 semanas y un máximo de 8. Tras unos meses lesionado y volver a disputar un partido el pasado viernes en Granada, el defensa vuelve a tener una lesión de gravedad.

El canterano del club, volvió al conjunto de Vallecas este verano tras finalizar su contrato con el Real Betis. Con los verdiblancos no pudo acabar la Liga por culpa de una lesión. Ya en la pretemporada con el equipo madrileño sufrió una lesión parecida que le había impedido estar a disposición de Paco Jémez hasta la semana pasada. En total, habían sido cinco meses los que había estado sin jugar entre un asunto y otro. Amaya, que había reconocido tras el partido en Los Cármenes estar "contentísimo", volverá a tener que trabajar duro en la soledad para recuperarse. 

Amaya se perderá, como mínimo, cinco partidos de Liga. Si todo fuera a la mejor velocidad y tardara seis semanas, Amaya únicamente no estaría en las próximas cinco jornadas de Liga, ya que el parón FIFA de mediados de noviembre, evitaría que fueran seis. Se da por segura la ausencia del ex-jugador del Wigan ante el Málaga, Eibar, Real Madrid, Celta y Almería. Los plazos máximos de recuperación haría que no jugara la ida de los dieciseisavos de Copa del Rey ante el Valencia en casa, ni las jornadas de Liga ante Sevilla y el propio Valencia. El primer partido fuera de los pronósticos sería la vuelta de Copa (16 de diciembre) y el último partido del año, ante el Espanyol en Vallecas.