A dos días del primer partido en Mestalla, el Rayo Vallecano volvió al trabajo con una sesión matutina en la Ciudad Deportiva a puerta cerrada. Los lesionados Zé Castro, Fatau y Cobeño realizaron trabajo aparte del grupo principal, meintras que Toño, aún sin el alta médica, realizó parte de la sesión junto al grueso. Trashorras, sancionado por acumulación de tarjetas de cara a la próxima jornada de Liga (sábado, 18:00 en directo por Vavel), realizó trabajo "alternativo" sobre el césped. 

En la mente de Paco Jémez no puede estar más que el Valencia. Primero, los franjirrojos se verán las caras ante el equipo de Nuno Espirito Santo en la Liga en la fecha ya comentada. Ambas escuadras han quedado también el próximo martes, también en Mestalla, para decidir la eliminatoria de Copa del Rey de dieciseisavos de final, tras el 1-2 en la ida jugada en Vallecas. 

Ante el numeroso bloque de bajas, el técnico grancanario ha decidido contar con Álex Campos, Alberto, Isi, Akieme, Clavería y Campillo, todos del filial, para nutrir correctamente el "intensísimo" entrenamiento. El trabajo ha consisitido en "varios circuitos de fuerza y finalización cara a puerta, trabajo de la presión y recuperación en espacio reducido, trabajo de remate con resistencia para los delenteros y fútbol a medio campo para finalizar". según ha comentado la web del club. 

Parece que Paco Jémez quiere revertir los malos resultados de las últimas fechas con mucho trabajo e intensidad. Por eso, el viernes los jugadores están de nuevo citados para comenzar el entrenamiento a las 10:00. En esta ocasión, el entrenamiento será abierto al público y a la prensa.