Emocionado, pero a la vez contento, así se mostró el jugador madrileño tras jugar su último partido vistiendo la camiseta franjirroja, ya que finalmente, como él mismo ha admitido, la temporada que viene militará en las filas de otro equipo, aunque todavía no ha desvelado cuál será. Durante toda su intervención, los halagos y agradecimientos hacia la afición rayista y el propio club han estado siempre en la boca del delantero, quien ha declarado lo arropado que se ha sentido siempre desde su llegada hace dos años.

"Muy satisfecho", así confesó sentirse con el partido de hoy y con la temporada realizada por el equipo. Ha querido destacar también el trabajo de sus compañeros durante todo el año, al que ha calificado de "trabajo heroico". Pero respecto a lo que significa el club para él, también ha dirigido unas palabras. "El Rayo es un equipo con limitaciones, pero que pone muchas ganas, mucho corazón. Siempre tiene un ímpetu por intentar mejorar cada día", manifestó.

También ha hablado sobre el cariño que ha recibido por parte de la afición rayista desde que aterrizó en Vallecas hace dos temporadas. "En estos dos años me han tratado muy bien. He tenido partidos buenos, otros no tan buenas, pero siempre me han sabido valorar y entenderme. Siempre digo que el equipo sin la afición no es nada, y creo que esta es una afición muy bonita y espero que año a año siga mejorando", confesó.

En referencia a su partida, ha admitido sentirse hoy bastante emocionado y con cierto sabor amargo al dejar un club que le ha aportado tanto. Sin embargo, reconoció estar alegre por la oportunidad que se le ha ofrecido para seguir labrándose una prometedora carrera, y agradece al Rayo brindarle la oportunidad de crecer como jugador estas dos campañas: "Estoy contento porque esta temporada me ha permitido que el año que viene tenga un nuevo reto". Además, añadió que aunque espera seguir creciendo profesionalmente, todo está en el aire porque nadie sabe qué puede deparar el futuro.

Con el gol que ha marcado, ha sumado 17 esta temporada. Pero, lamentablemente, no ha podido llevarse el trofeo Zarra como máximo goleador español en nuestra competición, ya que Aritz Aduriz, le ha superado marcando 18 goles. Desmiente sentir cierta desilusión por no llevarse este reconocimiento, ya que para él estos números conseguidos ya han significado todo un logro: "Para nada hay un sabor agridulce, porque en una temporada con 17 goles en  un equipo como el Rayo es magnífico". Quiso volver a destacar el papel fundamental de sus compañeros para conseguir estos números: "Estos 17 goles son trabajo de mis compañeros, y yo soy el que ha hecho que se metiesen", defendió. Además, no se ha olvidado de elogiar a Aduritz por su temporada y también de darle la enhorabuena por hacerse con dicho trofeo.

Por último, ha dejado abierta la puerta a la esperanza a volver algún día al Rayo Vallecano, al admitir que sería algo que le gustaría. Además, reconoció que seguirá viendo jugar al que ha sido su equipo estas dos últimas temporadas, ya que para él este equipo ha sido como su casa y así se lo han demostrado tanto aficionados como desde el club.