Una final al rojo vivo entre dos rivales directos durante toda la temporada, Real Madrid y Rayo Vallecano. En Ceuta, una ciudad que no desaprovechó la oportunidad de ver a los futuros cracks de ambos equipos y que vibró con el partido. Ocasión de gol para los merengues, que el balón entrara suponía la prórroga. Un capitán, Pablo Clavería, dispuesto a todo por evitarlo. El colegiado pitó mano del rayista, lo expulsó y señaló penalti a favor de los madridistas, que vieron regresar sus aspiraciones a alzarse con la Copa de repente. No contaron con la sangre fría de un portero que confió en sí mismo, que tuvo claro que en él estaban depositadas las ilusiones de todo un barrio y de un grupo que quería el doblete. Corría el minuto 94 y la mente y los guantes de Javi Ruiz detuvieron esa pena máxima que ya es historia del rayismo. Final del partido, campeones, llegó el éxtasis.

Javi Ruiz caminó emocionado por el césped del estadio Alfonso Murube mientras los ceutíes se rendían ante este equipo de luchadores. Aficionados, padres y algún periodista vallecano entonaban “La vida pirata”. A pesar de ello, encontró palabras para describir cómo se sentía: “Es el mejor día de mi vida, el mejor recuerdo. Es la final soñada: Te pitan un penalti, tienes enfrente al rival directo, el Real Madrid, con toda la tensión acumulada. Resulta que lo paras y pitan el final. Entonces, todos tus compañeros viene corriendo y se te echan encima, increíble”.

La confianza, la base del éxito.

Muchos pensaban que con un rival como el Real Madrid la gesta era más que improbable, pero a juzgar por las declaraciones del guardameta parece que el grupo pensaba que el fútbol no podía jugársela después de haber llegado hasta allí: “Se me ha hecho cuesta arriba cuando nos han metido el gol. Era un gol psicológico, la verdad. Realmente, nunca he pensado en que se nos fuera a escapar porque confío en mis compañeros. He pensado que nos iba a costar más. Este tipo de partido se nos dan bien, llevamos un año trabajando y confío en ellos”.

"Diego Merino es el artífice de todo esto"

¿Y qué pasa cuando a uno le toca pararse un penalti decisivo en el 95'? “En el penalti se te pasa de todo por la cabeza, que te lo van a meter, que vamos a prórroga... pero tuve claro que había que confiar. Al final, lo paré y mira, campeones”, contestó el héroe de la final con una sonrisa de oreja a oreja. Hay que recordar que el juvenil ganó la Liga in extremis en Alcorcón, dejando a los blancos con la miel en los labios. Esto puede llevar a pensar que este título sabe mejor por el rival ante el cual se consiguió, pero el portero franjirrojo es claro: “Es cierto que el Real Madrid ha sido nuestro rival más directo esta temporada, pero tú quieres la Copa. Da igual si es el Real Madrid, el Celta o el Valencia el rival, quieres ganarla.

Mientras se desarrollaba la conversación, un entrenador con un gran futuro por delante no paraba de recibir felicitaciones en forma de besos y abrazos. Con solo 27 años, Diego Merino ha conseguido un doblete demostrando a un grupo de chavales que el trabajo y la confianza en uno mismo es la base del éxito: “Diego Merino es el artífice de todo esto, sin él no hubiera sido posible. Somos una piña, vamos todos a una. Lo que nos diferencia de otros equipos es eso, no que tengamos más calidad. Por ejemplo: los desconvocados vienen a vernos. En los entrenos, nos apoyamos todos... Ha sido gracias a él que hemos sido campeones de Liga y Copa”, contestó Javi cuando se le preguntó por el técnico extremeño.

"Es el mejor día de mi vida. Ha sido la final soñada"

Posiblemente el club vallecano esté ante la mejor generación de futbolistas de su cantera. Nombres como Pablo Clavería, Joni Montiel, Raúl Uche, Sergio Akieme o el propio Javi Ruiz, por destacar algunos de esta “cosecha franjirroja”, sonarán con fuerza en los próximos años en Vallecas. Muchos de ellos ya tienen una cita con Paco Jémez para realizar la pretemporada con el primer equipo, aunque el grupo ya no jugará junto: “Este grupo por edad se tiene que separar, pero queremos seguir haciendo historia. En el Rayo nunca había pasado esto.”

Una declaración de intenciones que demuestra el hambre de triunfos que tienen, pero manteniendo los pies en la tierra: “Nosotros no tenemos todo hecho. Somos campeones, sí, pero mañana ya tenemos que pensar en la siguiente temporada. En nada empieza la pretemporada y no podemos vivir de recuerdos”. Vivir no, pero recrearse, sí. Tomen asiento, el espectáculo continuará.

VAVEL Logo