Los siempre difíciles comienzos a domicilio

El camino a la décima Copa de Europa comienza para el Real Madrid y lo hace en el infiero de Turquía. Los blancos, dirigidos esta temporada por Carlo Ancelotti, visitarán la siempre complicada cancha del Galatasaray, escenario donde sucumbieron en la vuelta de los cuartos de final de la UEFA Champions League de la pasada campaña. Sin embargo, la goleada en el Santiago Bernabéu en el encuentro de ida bastó a los de José Mourinho para pasar a semifinales, donde cayeron ante el Borussia Dortmund.

El Galatasaray será un rival duro, una muestra es que el conjunto blanco jamás venció en Estambul y si a eso le sumamos los difíciles comienzos del conjunto blanco en la competición cuando debutan lejos del Santiago Bernabéu, el encuentro ante los turcos adquiere una importancia aún mayor.

Desde que se instauró el formato de los octavos de final, el Real Madrid ganó los cinco debuts en los que comenzó en la capital de España, mientras que lejos del Bernabéu ganó en dos ocasiones ante rivales de escasa entidad y sucumbió, claramente, en los otros tres enfrentamientos.

Estadísticas como local / estadísticas como visitante

Drogba, goleando desde hace una década

La primera vez en la que se disputaron los octavos de final de la Champions fue en la campaña 2003-04. Carlos Queiroz era el entrenador de un Real Madrid lleno de estrellas, lleno de 'galácticos'. Los blancos quedaron encuadrados en el Grupo F junto con el O.Marsella, el Partizan de Belgrado y el Porto, dirigido por José Mourinho y que finalmente sería el campeón del torneo.

El equipo madrileño abrió la competición en casa, en el Santiago Bernabéu, ante el Olimpique Marsella y consiguieron ganar por 4-2. Sin embargo el comienzo en Champions dejó algunas dudas al equipo liderado por Zidane y Ronaldo y es que un jovencísimo Didier Drogba adelantó a los franceses al poco de comenzar el encuentro.

La sorpresa duró poco ya que antes del descanso, R.Carlos y Ronaldo dieron la vuelta al marcador para que en la segunda Figo y el propio ariete brasileño sentenciaran el encuentro en favor de los locales, que pasaron como primeros de grupo. En esa edición el Real Madrid no conseguiría pasar de los cuartos de final tras ser apeados por el Mónaco, finalista en aquella edición, y que fue liderado por Morientes y Ludovic Giuly.

Tres humillaciones consecutivas

Tras la debacle en el estadio monegasco, el Real Madrid no consiguió pasar de octavos de final hasta la llegada de José Mourinho al banquillo merengue. La decadencia blanca fue tal que, en las tres siguientes ediciones, fueron goleados en los debuts europeos, siempre a domicilio.

El primer rival que sacó los colores a los blancos fue el Bayer Leverkusen, finalista en la última Champions ganada por los madridistas. Ambos equipos quedaron encuadrados en el Grupo B, junto con la Roma y el Dínamo de Kiev. El equipo de Camacho salió goleado (3-0) por unos alemanes que fueron netamente superiores en todo el encuentro y que gracias a los de França, Krzynówek y Berbatov sumaron los tres puntos.

Los blancos caerían en octavos ante la Juventus en la que sería la primera de muchas decepciones europeas a las primeras de cambio. Los dos siguientes debuts europeos fueron otras tantas decepciones, ambas a domicilio y con un rival que en los últimos años se le ha atragantado al conjunto blanco, el Olimpique Lyon.

En el primer envite entre ambos la goleada fue idéntica a la recibida ante los alemanes un año antes. Tres goles, obra de Wiltord, Juninho y Carew, en apenas diez minutos sentenciaron a un paupérrimo conjunto blanco que fue sometido al ritmo francés y que claudicó sin apenas oposición.

Algo similar ocurrió en la campaña posterior cuando los dos equipos se volvieron a ver las caras, también en Gerland, en el debut en la competición europea. En esa ocasión el resultado fue algo más corto (2-0) con los goles de Wiltord y del ahora colchonero, Tiago. Sin embargo la imagen del Real Madrid, que alineaba a Raúl, Cassano y Van Nistelrooy en la punta de inicio, fue incluso peor que la de la campaña anterior y en esta ocasión ni fueron capaces de tirar a portería. Esa bochornosa actuación fue la última derrota en los debuts europeos de los blancos.

Victorias con más goles que juego

Tras esas derrotas llegaron los triunfos. Werder Bremen, Bate Borisov y Dinamo de Zagreb fueron los rivales a los que el conjunto blanco tuvo que superar visitando únicamente al débil equipo croata. Sin embargo esos triunfos no fueron sinónimo de éxitos y nuevamente cayeron a las primeras de cambio. Ni Schuster, ni Juande ni tampoco Manuel Pellegrini fueron capaces de llevar al Real Madrid más allá de los octavos de final y Roma, Liverpool y Lyon fueron los encargados de apear al 'Rey de Europa' de su competición predilecta.

Esa tendencia derrotista, de caer prácticamente antes de empezar, cambió con la llegada de José Mourinho al banquillo del conjunto blanco. El técnico blanco dio ese plus de competitividad y tras ser campeón con el Inter en el propio Santiago Bernabéu buscó la décima Champions blanca, pero sin éxito.

Sus debuts fueron sufridos, con apenas una victoria cómoda. En su primera temporada ganó fácil al Ajax por 2-0 en el Santiago Bernabéu pero cayeron derrotados por el FC Barcelona, posterior campeón, en semifinales. Con menor brillo superó el único debut a domicilio que el técnico portugués tuvo que afrontar mientras fue entrenador blanco. El Real Madrid visitó Zagreb para medirse al Dinamo y consiguió los tres puntos gracias a un solitario tanto de Di María en la segunda mitad. Ronaldo, que acabó con el tobillo ensangrentado, terminó desquiciado y encarándose con la afición rival.

En el último debut europeo del conjunto blanco se vio, probablemente, el encuentro más emocionante. El Manchester City, campeón de la Premier League, visitó el Bernabéu en la jornada inaugural de un grupo en el que también estaban Borussia Dortmund y Ajax. El partido en su primera mitad fue bastante aburrido y falto de ritmo, sin embargo, en la recta final del partido se revolucionó y se vio un verdadero espectáculo.

Dzeko adelantó al City a falta de 25 minutos para el final del encuentro y las dudas empezaron a inundar a un Bernabéu que silbó a su equipo por el juego y el mal comienzo de temporada. Marcelo se encargó de empatar el partido pero Kolarov, en el minuto 87, puso nuevamente a los ingleses por delante. Todo parecía indicar que el City, más entero durante el partido, se llevaría la victoria pero dos goles en el descuento, el último en el minuto 94 llevaron al Real Madrid y al público del Bernabéu al éxtasis. Los primeros tres puntos europeos se quedaron en Madrid pero no fueron suficientes para lograr el liderato del grupo, que se lo quedó el finalista de esa edición, el Borussia Dortmund, que apeó al Real Madrid en semifinales.

Así el Real Madrid, en los últimos diez debuts europeos, consiguió un registro de siete victorias y tres derrotas, la última en el 2006. Sin embargo, el equipo blanco no fue capaz de superar a ningún rival de entidad si el partido se jugaba lejos del Santiago Bernabeu.

Fotos interiores: The Guardian y MARCA