Getafe - Real Madrid: sexto derbi para los blancos

El partido que enfrentará al Real Madrid y al Getafe en esta vigésimo tercera jornada del campeonato nacional de Liga será, nada menos que el sexto derbi que los blancos disputarán en la presente temporada. Aunque algunos puedan no tener tanta relevancia como otros, los de Carlo Ancelotti se han medido a tres equipos de la capital española, cosechando un balance general muy favorable a sus intereses. De entre estos cinco derbis disputados, destacan los vividos ante el Atlético de Madrid, no sólo por la envergadura del rival, sino por la cantidad de veces que se han medido -tres hasta la fecha- a falta del choque de vuelta que tendrá lugar dentro de dos jornadas. Calendario en absoluto sencillo el que afronta el conjunto 'merengue', que sigue viendo cómo la cabeza de la tabla le exige un triunfo tras otro para aguantar la marcha fijada por el propio Atlético y por el FC Barcelona, que no ceden.

El pistoletazo de salida a la sucesión de derbis la daba, precisamente el Getafe allá por la jornada cinco. El Real Madrid recibía al equipo azulón después de haber empatado en El Madrigal ante el Villarreal en un partido muy sufrido y trabajado; en medio, además, de las dudas que caracterizaron el juego del conjunto blanco en el inicio de la temporada. A esas dudas contribuiría el tempranero tanto de Lafita en el minuto cinco, que hacía saltar todas las alarmas en el Santiago Bernabéu. Tocaba ponerse el mono de trabajo y arrancar con una de las grandes señas de identidad del conjunto blanco en los últimos tiempos: la remontada.

En el primer derbi de la temporada, Cristiano superaba a Hugo Sánchez como goleador histórico Pepe certificaría la intención con el tanto del empate en el minuto 19, un gol que prendería la maquinaria blanca -no en su mejor versión- para que, ahora sí, la afición del 'merengue' viera a los suyos hacer lo que debían: ganar. En volandas de un Cristiano estelar y un Di María estratosférico, acompañados de un gran Isco, llegaría al partido el Real Madrid. El crack portugués sería, precisamente el que adelantaría a los suyos por primera vez en el marcador para que Isco Alarcón concediese en el 33 el tanto de la tranquilidad, un resultado que confirmaría de nuevo Cristiano con el cuarto y último de la noche: el 4-1. El tanto del luso, además, le serviría al flamante Balón de Oro 2013 para superar a Hugo Sánchez en la tabla de goleadores históricos de la 'casa blanca'.

Bastante más amargo fue el paso del siguiente equipo madrileño por el Santiago Bernabéu, un estadio inexpugnable y fortaleza blanca hasta que llegó el Atleti, sólo dos jornadas después. Ni el triunfo ante el Getafe ni la victoria ante el Elche habían servido para disipar dudas y el juego del equipo blanco seguía siendo objeto de debate y crítica, algo muy alejado de la contundencia y solidez con la que llegaba el Atlético a 'territorio enemigo'. Y las cosas en Chamartín no hicieron sino ratificarse: el conjunto dirigido por Diego Pablo Simeone pasó por encima del local, evidenciando sus carencias y ofreciendo toda una lección de su juego en equipo, un encuentro que encarrilaría Diego Costa en el minuto 11, certificando la primera derrota en casa para el Real Madrid.

Que los blancos no ofrecían signo de mejora era algo que quedó patente con el siguiente derbi, el disputado ante el Rayo Vallecano en el Estadio de Vallecas. Nada haría pensar que pudiera llegarse a esta conclusión tras la demoledora primera mitad que protagonizaron los blancos: Cristiano Ronaldo abría el marcador con tres minutos de tiempo cumplido, dejando clara su intención de que las dudas que generaba el equipo empezasen a morir; a modo de refuerzo llegaba Karim Benzema para establecer el 0-2 a la media hora, un tanto al que se sumaba otro más de Cristiano, lanzado en la carrera por el pichichi con el 0-3 poco después de inaugurarse la segunda mitad -minuto 49-. No obstante, el Rayo no iba a bajar los brazos, mientras que el Madrid iba a confirmar su tendencia a protagonizar la obra 'Dr. Jeckyl y Mr. Hide'. Nunca se sabía si iba a ser la primera mitad o la segunda pero lo que los hombres de Carlo Ancelotti dejaban claro en aquel entonces era que su mejor versión daba sólo para 45 minutos, mostrando después una cara totalmente opuesta. En esta ocasión, lo malo llegaba en los segundos 45 minutos y los dos tantos de penalti de Jonathan Viera en el 53 y el 55 hicieron temer lo peor al cuadro de Ancelotti, que acabó prácticamente pidiendo la hora.

Eran malos tiempos para la defensa blanca, que no veía rastro del mejor Sergio Ramos ni tampoco del mejor Pepe. Con Varane lesionado y la inexperiencia de Nacho, al entrenador italiano del Real Madrid se le tornaba un enorme desafío dar con la muralla blanca, la misma que debía dar respaldo a los goles que sí llegaban mediante la letal ofensiva 'merengue'. Sin embargo esta no podría tirar siempre de goleada para certificar triunfos y eso debió ser algo que acabaron por entender los zagueros para darle la vuelta a la situación.

Visto lo visto hasta el momento, que los cruces en el sorteo de la Copa del Rey decretasen un posible enfrentamiento entre Atlético y Real Madrid no debió agradar demasido a estos últimos, si bien la sed de revancha y la mejoría experimentada a lo largo del desarrollo de la temporada sí hacían apetecible el reencuentro con los colchoneros. Y si ante ellos, los blancos habían certificado en Liga uno de sus peores partidos, el torneo del K.O trajo la otra cara de la moneda. El Madrid venció y convenció, en alianza con la fortuna para dar un paso de gigante en la búsqueda de la final copera con el 3-0 cosechado en el Santiago Bernabéu, un duelo de alto voltaje que los de Ancelotti utilizaron para devolver las cosas a los que ellos y su afición consideran el orden natural. El mal partido ante los colchoneros en Liga quedó olvidado y el optimismo acabó de hacer el resto.

Foto: Ignacio Gil - ABC.es

Dos autogoles del Atleti en un gran partido del Madrid Insua abría el marcador con una desafortunada acción en el minuto 17 que inaguraba el luminoso pero no para su equipo, sino para el rival. Los blancos no modificaron el esquema impuesto por Ancelotti y fueron dueños y señores del partido hasta que Jesé dio el enésimo golpe sobre la mesa en el legítimo reclamo de su lugar en el equipo con un nuevo gol en el 57, que redondeó otro infortunio para los rojiblancos: Miranda, autor del gol que le había dado al Atlético el título copero un año antes en aquel mismo escenario y ante aquel mismo rival en la prórroga, anotaba esta vez el tanto de la sentencia para los suyos: el 3-0 para el Real Madrid.

Con la eliminatoria cuesta arriba y una derrota en Liga que tocaba la moral atlética, los hombres del Cholo encaraban la vuelta concienciados de lo complejo de la gesta que se les exigía pero convencidos de sus posibilidades. Hasta que la mala suerte les recordó que seguía en su contra. Cristiano Ronaldo era objeto de penalti en el minuto 6, pena máxima que anotaría él mismo, adelantando a los suyos y complicando aún más si cabía las cosas para el conjunto local. Y sí cabía más; Gareth Bale se iba al suelo en el interior del área grande con 16 minutos transcurridos para que de nuevo Cristiano, desde los once metros, le asestara el golpe de gracia a los rojiblancos: final y revancha para el Madrid.

Con el excelente bagaje de cinco derbis disputados, cuatro triunfos, una derrota y una clasificación para la final de Copa, el Madrid encara su sexto derbi con optimismo. Barcelona y Atlético siguen contando sus partidos por victorias y eso obliga a los blancos a hacer lo mismo si no quieren perder la estela de la liga más emocionante de los últimos años. El Getafe será el próximo escollo en el camino y es que los duelos disputados en el Coliseo Alfonso Pérez no han sido, tradicionalmente, plato de fácil digestión para los 'merengues': nueve partidos, cuatro victorias, cuatro derrotas y un empate. Hoy el desequilibrio busca a un vencedor.

Rayo Vallecano y de nuevo Atlético de Madrid aún tienen cuentas pendientes con el conjunto que dirige Carlo Ancelotti; especialmente este último duelo puede resultar decisivo de cara a los intereses de ambos equipos en lo que al título de Liga se refiere -todo pasa por aguardar a la situación en al que llegarán al que será el séptimo derbi de la temporada para el Madrid-.

En todos los derbis del Madrid, hubo un gol antes de los 20 minutos En todos y cada uno de los derbis que el Real Madrid ha disputado, los goles llegaron siempre antes de los primeros 20 minutos. En el primer partido entre equipos madrileños, disputado en el Bernabéu ante el Getafe, Lafita anotaba con solo 5 minutos jugados para que Pepe respondiera con 20 transcurridos. El encuentro ante el Atlético también avanzaba a los rojiblancos de forma temprana -minuto 11- en un marcador que ya no volvería a moverse más. De igual modo, la cita frente al Rayo Vallecano también vea movimiento en el luminoso con sólo tres minutos jugados; sería el primer tanto de Cristiano para poner en ventaja a los suyos.

Los derbis coperos no rompieron la dinámica establecida. Insúa anotaba en propia puerta con 17 minutos de tiempo transcurrido, mientras que en el choque de vuelta, Cristiano marcaba con seis minutos en el cronómetro. En esta ocasión, el crack portugués, que suma seis goles en los cinco partidos citados no estará presente, cumpliendo su segundo encuentro de sanción tras la expulsión sufrida en San Mamés; él ha inaugurado el marcador en dos ocasiones, de modo que sólo restará por ver si la tendencia sigue produciéndose y el Coliseum Alfonso Pérez celebra o sufre un gol antes de que se cumplan 20 minutos. En todo caso y más allá de los goles, todo derbi augura emoción, disputa y un partido vibrante. Y es que un derbi es siempre un duelo diferente.