El ensayo ha vuelto a dar error en el laboratorio madridista. Segundo amistoso de pretemporada del Real Madrid y segunda derrota, esta vez ante un clásico como la Roma. Sin demasiadas conclusiones extraíbles dada la fuerte presencia de canteranos en la plantilla, los blancos, que esta vez estrenaron el color fucsia, no fueron capaces de doblegar a su rival italiano a pesar de llevar el peso del choque. Un gol del eterno Francesco Totti fue suficiente para inclinar la balanza del lado de los romanos. Con esta derrota se agotan las balas para ganar la International Champions Cup, y la primera victoria de la nueva temporada tendrá que esperar. 

Control estéril desde el primer minuto

Carlo Ancelotti pudo disponer de varios jugadores internacionales que se perdieron el primer partido, como Casillas, Ramos, Alonso y Modrić. Los cuatro fueron titulares y dieron el salto de madurez que necesitaba un equipo formado por muchos canteranos para llevar la batuta del encuentro. Un 4-3-3 con Alonso, Modrić e Illarramendi fue la apuesta del técnico del Real Madrid, que dio como resultado el control del esférico.

Si en la medular los madridistas consiguieron monopolizar el juego, en las líneas ofensivas las ideas no estuvieron tan claras. Isco jugó como falso nueve y no estuvo acertado en su posición reconvertida. Sus compañeros en las alas, Bale y Vázquez, tampoco fueron capaces de enviar el cuero al fondo de las mallas.

La estrella de Roma aún brilla

Con el partido a priori controlado por el Madrid a pesar de la falta de gol que acusaba el equipo a medida que los minutos pasaban, la Roma puso sus cartas sobre la mesa. La calidad de hombres como Pjanić era el principal peligro, pero nadie podía olvidarse de un nombre tan grande como el del propio club romano: Francesco Totti.

El eterno líder de la AS Roma, hoy con 37 años, fue el verdugo del Real Madrid en una puntual jugada en la que, tras un desajuste defensivo entre Carvajal e Illarramendi, el balón llegó al corazón del área, dónde esperaba Il Capitano y no perdonó. Gol con 57 minutos jugados y los italianos se ponían por delante.

Estos fueron los mejores minutos de los romanos, que un minuto después del gol de su capitán tuvieron en las botas de Pjanić el 0-2. El esférico pasó cerca del palo izquierdo de la portería de Diego López y dejó con opciones al Madrid.

De partido a trámite

El Real Madrid lo intentó, pero la falta de inspiración de sus principales activos en ataque fue determinante. Así, cuando el reloj empezó a adentrarse en la última media hora de partido, Ancelotti decidió restar importancia al marcador final y optó por dar oportunidades a los jóvenes. Llorente, Mascarell, Medrán, Sobrino y Raúl de Tomás disfrutaron de minutos, pero no consiguieron cambiar el resultado.

El choque se dejó llevar y así se llegó al final. Con el pitido del colegiado, se materializaba la victoria de la Roma por 0-1 y la eliminación del Real Madrid de la International Champions Cup.

Lo más importante está por llegar, y los dos tropiezos iniciales de los blancos parecen sólo fogueo ante las verdaderas batallas que están por venir. Como el propio Ancelotti ha dicho al final del encuentro, tendrán "más tiempo ahora para preparar la Supercopa de Europa". Y todo queda en un mero trámite.