En la historia a nivel continental, hay unos pocos equipos que copan el elenco de destacados, cuyos nombres aparecen escritos en letras doradas en el Olimpo de la Champions. La competición más prestigiosa del mundo futbolístico a nivel europeo acoge cada temporada desde mediados de los 50 a los mejores de cada Liga, que pelean por el cetro europeo.

Dimes y diretes entre los gigantes a lo largo de más de seis decenios, que concluyen en encuentros épicos en escenarios para el recuerdo. Dos de los mayores transatlánticos europeos, y también de los más existosos, son el Liverpool y por supuesto el Real Madrid, rey de Copas en la competición con diez entorchados de campeón.

Dos equipos con trayectoria por separado

Por mucha solera que ambas entidades agolpen en sus respectivos palmarés continentales, sus duelos directos se cuentan con los dedos de una mano. Tanto ingleses como españoles exponen además sus respectivos feudos, considerados ambos templos del fútbol mundial. Paradójicamente, el Madrid únicamente ha pisado Anfield, territorio 'red', en una ocasión, y saliendo de los dominios del Liverpool con una goleada en la alforja.

No es el cuadro que dirige Brendan Rodgers el que mejor se le da a los blancos, puesto que en los tres enfrentamientos previos al doble duelo en la fase de grupos, no han logrado la victoria en ninguno de ellos. Para más inri, los diferentes conjuntos merengues que han opositado frente al club de la ciudad de los Beatles, se han quedado 'secos' de cara a portería en partido oficial.

Contra la mala fortuna

La más dolorosa, además de la goleada de 4-0 sufrida en Anfield en la temporada 2008/09, fue la cosechada en la Final de la Champions League en la 80/81, el cuadro dirigido por Vujadin Boskov cayó por 1-0 en el Parque de los Príncipes, gracias a un gol con el tiempo reglamentario cerca de cumplirse, de Alan Kennedy.

Si el Madrid gana en Anfield, lo haría por primera vez en su historia y asestaría un golpe a su rival mirando a la siguiente ronda

De producirse una redención blanca en el próximo enfrentamiento entre ambas entidades puede ser inclusive, más determinante. Y es que tras el tropiezo de los anglosajones ante el Basilea, un nuevo traspiés y por tanto, un paso adelante de los merengues en la tabla, dejaría entre ambos una diferencia de seis puntos, con tan solo nueve más en juego, lo que aseguraría la clasificación los blancos de manera virtual, y prácticamente también, hacerlo como primeros de grupo.

Para aferrarse al éxito, los de Ancelotti miran a la campaña 1989, a la que se dio comienzo amarrando el Trofeo Santiago Bernabéu ante los 'reds' en el templo merengue, gracias a un soberano 2-0, con los goles en menos de cinco minutos de Hugo Sánchez primero, y Butragueño instantes después.