El tiempo no ha sido el mejor aliado del Real Madrid en su llegada a Liverpool. Los hombres de Carlo Ancelotti desembarcaron en Inglaterra recibidos por un vendaval, con rachas superiores a los 100 km/h, que incluso llegó a mover la escalerilla por la que los futbolistas blancos descendieron del avión.

Ya sobre el campo, tras las pertinentes charlas con los medios de comunicación, los jugadores merengues se pusieron a las órdenes del técnico italiano para culminar la preparación de su próximo envite continental, en la vuelta de la Champions League al calendario madridista. El rival, el Liverpool, abre las puertas de Anfield para acoger un choque de altos vuelos (20:45 horas; C+ Liga de Campeones y VAVEL).

El mítico feudo ha sido el escenario de la citada sesión, en la que Ancelotti ha dividido a sus hombres en dos grupos, conformando el primero con los jugadores de campo, que tuvieron en el balón al principal protagonista de sus ejercicios. Del otro lado, los tres guardametas se pusieron a las órdenes de Villiam Vecchi para trabajar al margen de forma específica, tal y cómo informó la web del club.