En el Santiago Bernabeú están de enhorabuena ya que el equipo marcha con paso firme en todas las competiciones y además desplegando un futbol atractivo para el aficionado. Cuentan muchos de sus partidos por goleadas teniendo en Cristiano Ronaldo a su máximo referente pero si bien la verdadera sorpresa de la temporada está siendo el centrocampista español, Isco Alarcón.

Isco ha sabido adaptarse a la perfección a los distintos roles que el técnico italiano Carlo Ancelotti le ha ido asignando durante la temporada y de aquel centrocampista ofensivo de calidad excelente que no trabaja en defensa ya no queda nada. La lesión de Khedira le permitió hacerse un hueco en el once inicial del equipo blanco, el jugador sabía que era una oportunidad única para demostrarle al técnico que podía contar con él para jugar en cualquier demarcación del centro del campo no tan solo en la parcela ofensiva y así fue. Además el equipo tenía dos partidos muy importantes contra Liverpool y Barcelona y el internacional pasó con nota ambos test ganándose así la confianza de compañeros, cuerpo técnico y afición.

En estos días Isco está viviendo sus mejores horas en el club blanco pero esto hace un tiempo y más concretamente la temporada pasada no fue así. La temporada pasada tuvo un rol más secundario siendo una de las primeras piezas que utilizaba Ancelotti para salir desde el banquillo. El once tipo que manejaba el técnico italiano no dejaba hueco a Isco ni en el tridente de arriba ni en el del centro del campo que ocupaban Modric, Xabi y Di María pero lo que pudiera parecer un problema fue totalmente al contrario, se fijó en el trabajo que desarrollaban estos jugadores en el campo para imitarlo con el fin de poder disputar minutos.

El mejor Isco ante "su Málaga"

Florentino Pérez en el verano de 2013 creaba un nuevo proyecto con el objetivo de hacer olvidar la etapa vivida con el luso José Mourinho. Para ello llegaban al club de Concha Espina un técnico de reconocido prestigio a nivel mundial y un grupo de jóvenes jugadores nacionales como Isco o Asier Illarramendi o la vuelta a casa de Dani Carvajal.

Isco llegaba al Madrid procedente del Málaga donde era la gran referencia de un equipo que había llegado hasta los cuartos de final de la Champions League. El crack explotó con Manuel Pellegrini jugando como enganche y teniendo dos guardianes defensivos por detrás como eran Iturra o Toulalán, la gran temporada que disputó le llevo a conquistar el galardón personal Golden Boy y en verano alzarse con el Europeo sub-21 con España. Su calidad era indudable y tan sólo necesitaba una oportunidad y continuidad para desarrollar su futbol.

La primera temporada en Málaga fue muy similar a su primera temporada en el Real Madrid, un proyecto galáctico gracias a los petrodólares del jeque Al-Thani que habían llevado al club de la Costa del Sol a jugadores de la talle de Santi Cazorla o Ruud Van Nistelrooy. El club de su tierra hizo una gran apuesta por el tras pagar la clausula de rescisión de seis millones de euros al Valencia donde se había formada en las categorías inferiores tras salir de Atlético Benamiel.

Con tan solo veintidós años lo mejor de Isco Alarcón está por llegar y a buen seguro que con el rendimiento que está teniendo esta temporada seguirá creciendo como jugador de primer nivel y llevará a su club y por qué no a la selección a conquistar títulos

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