Se acabó la espera. Han tenido que pasar rumores, papeleo, noticias, horas de avión, ruedas de prensa, fotos y entrenamientos, pero el momento más importante de Lucas Silva como madridista ya está a escasas horas de distancia. La revolución deportiva y mediática que ha sufrido la vida del joven centrocampista brasileño tendrá su culmen a las 16:00 del sábado, 31 de enero de 2015. Llegará entonces su turno: saltará al campo para defender el blanco madridista ante su público contra la Real Sociedad.

Días locos

Los últimos días para Lucas Silva han sido un constante desfile de acontecimientos, eventos y noticias. El 23 de enero se hizo oficial su llegada al Real Madrid procedene del Cruzeiro, y desde entonces han pasado ocho días frenéticos.

La contratación de Lucas Silva no es un farol. El Real Madrid le considera una pieza clave para el presente y el futuro, y prueba de ello es su contrato hasta 2020 con la entidad blanca. Además, su estreno de blanco no va a ser demorado por su entrenador, Carlo Ancelotti. Así lo ha confirmado el técnico italiano en la rueda de prensa previa al choque con la Real Sociedad: "Lucas Silva ha llegado con una buena condición física y está bien. Está en la convocatoria y es posible que le demos minutos".

Una alternativa real

La predisposición de Ancelotti para alinear a Lucas Silva da idea de que el brasileño va a ser un activo importante en el esquema de Carletto. Se acerca el tramo importante y decisivo de la temporada, y su contratación responde a la necesidad de tener un relevo de garantías en la parte del campo que sostiene al Real Madrid: la medular.

El 16 madridista es un comodín para cualquier necesidad merengue. Su posición natural es la de pivote, por lo que podría incrustarse perfectamente en el 4-3-3 de Ancelotti en la posición que ocupa Kroos, siendo el centrocampista más atrasado. De esa forma, los blancos tendrían a un jugador que junta la capacidad de toque y la visión de juego de un creador con la habilidad para el corte y la envergadura de un destructor. Pueden ser muchos los partidos en los que Lucas Silva sea el parche perfecto cuando un encuentro se complique o necesite estabilidad.

Junto a sus cualidades como pivote, su potente disparo desde fuera del área le hace también peligroso de cara a la portería rival. En el 4-3-3 de Ancelotti no hay demasiadas oportunidades para ser una baza ofensiva en la posición de Lucas Silva, como ha demostrado un Kroos que se ha mantenido más atrasado y lejos del área que sus compañeros, pero nunca es descartable que el brasileño saque a pasear su látigo en forma de pierna.

Estreno de altura

La primera toma de contacto de Lucas Silva con el césped y la afición del Bernabéu coincidirá con una prueba exigente: la Real Sociedad. El conjunto txuri urdin trae nefastos recuerdos a la escuadra madridista después de que en la primera vuelta vencieran por 4-2 en Anoeta tras remontar un 0-2.

El equipo entrenado por David Moyes es un rival incómodo y que en la ida supo destruir al Real Madrid. A pesar de la renta de dos goles que tuvieron los blancos, se descompusieron y muchas causas de esa caída estuvieron en el centro del campo. Especialmente sangrante fue la falta de un jugador de cierre, un pivote como Lucas Silva capaz de recuperar terreno y evitar la ruptura de líneas. Frente a la Real Sociedad, ese desequilibrio entre la defensa y el centro del campo generó un peligro mortal:

Lucas Silva tendrá enfrente a un equipo con centrocampistas de calidad como Esteban Granero, Xabi Prieto o Markel Bergara que complicarán la vida a un joven brasileño que aún tiene que aclimatarse. No saldrá de inicio, pero el escenario que se encuentre si salta al verde puede ser muy dispar: desde un partido controlado por los locales hasta un duelo muy sufrido en el que sea la Real Sociedad la dueña del ritmo. Toda una prueba de madurez nada más llegar para Lucas Silva.

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Sobre el autor
Nacho González Rueda
Periodismo y Comunicación Audiovisual en la Universidad Carlos III de Madrid. Coordinador de NBA. Redactor de Real Madrid y Premier League. Creo en el ´where amazing happens´ del baloncesto americano, en la eternidad de los vikingos y en la magia de un campo de fútbol inglés. También fui redactor del Mundial de Fútbol Brasil 2014 y Mundial de Baloncesto España 2014. Contacto: [email protected] ¡Nos leemos!