El Castilla sale de playoffs en un polémico partido

El Real Madrid Castilla recibía al Yugo Socuéllamos en la vigésimo octava jornada de la Segunda División B. Los blancos necesitaban la victoria para colocarse líderes provisionales a la espera de lo que suciediera en el encuentro del Bilbao Athletic. Los visitantes, por el contrario, querían seguir escalando en la clasificación en un campo muy complicado.

Los primeros minutos transcurrieron con mucha velocidad, especialmente gracias a las internadas por banda izquierda de Burgui. Su velocidad y regate generaron la primera ocasión del partido, que despejó Coronado a córner. Tras esta ocasión, las fuerzas se igualaron y el dominio blancose diluyó brevemente.

El balón parado vuelve a hacer daño al Castilla

Ninguno de los dos equipos conseguía acabar sus posesiones con gol. El balón estaba especialmente en los pies de los madridistas, pero las ocasiones no terminaban de llegar. Así, en la primera de partido para los visitantes, la zaga merengue despejó a saque de esquina sin saber que el balón parado podía ser su verdugo.

La pelota la puso Chato desde la esquina izquierda de Yañez y tras un barullo en el área, Pelegrina empujaba el balón a la red con un Rubén Yañez ya vatido en el césped del área pequeña. Pronto se ponía de cara el partido para los visitantes, que arropados por su afición se sentían como en casa. Más de 1500 aficionados se habían desplazado a Madrid para vivir un gran partido en un ambiente espectacular.

El colegiado expulsa a Álvaro Jiménez

El Yugo Socuéllamos decidió que con un gol era suficiente y comenzó a tocar el balón en su área y a intentar arañar unos segundos al cronómetro. El árbitro del partido, Jaime Ruiz Álvarez, vio agresión en un forcejeo de Álvaro Jiménez con Montes y expulsó al madridista en el minuto 24 de partido. Con todo el encuentro por delante, el colegiado decidió que era necesario mandar al jugador a las duchas y el Castilla tenía una difícil papeleta para el resto del encuentro. La primera parte acabó con polémica, tras una jugada similar a la de la expulsión que tan solo fue amarilla para Quique Domínguez. De camino al túnel de vestuarios, el colegiado pudo comprobar el desagrado de toda la grada del Di Stéfano.

Ocaña sentencia tras un polémico penalti

La segunda mitad comenzó con un Castilla volcado sobre la portería de Coronado, que vió la amarilla muy pronto por perder tiempo. Las ocasiones más claras llegaron de los pies de Burgui y la cabeza de Torró, pero ninguno de los dos logró anotar el primero para los merengues en el Di Stéfano.

Tras los primeros quince minutos de empuje blanco, el Socuéllamos llegó al área de Yañez y sacó mucho petróleo. Un centro al área fue a parar a la zona de Varela, quien impactó levemente con su mano sobre la cara del delantero visitante. El colegiado señaló penalti ante las protestas de todos los jugadores madridistas. Ocaña fue el encargado de transformar el penalti y colocar al Yugo Socuéllamos dos arriba. El partido estaba prácticamente sentenciado.

El arreón final del Castilla fue inútil para empatar un encuentro que desde la expulsión de Álvaro Jiménez tenía un claro favorito. En los instantes finales, Diego Llorente dio el susto tras caer desplomado por un choque con su compañero Torró, pero pudo abandonar el rectángulo de juego por su propio pie. Con este resultado, el Castilla se queda sin liderato y el Yugo se coloca en décima posición en la zona tranquila de la tabla.