Al igual que este, el pasado año el Real Madrid tenía bajo palos a dos de los mejores porteros del mundo. En verano, el cuadro blanco fichó a Navas, lo que propició la salida de un Diego López que en su segunda etapa como jugador merengue había podido, por fin, disfrutar de la titularidad en el equipo de su vida, a pesar de todo el ruido mediático que se generó a su alrededor.

En una entrevista con el programa 'Fiebre Maldini', el de Paradela repasó su paso por el conjunto madridista, dividido en dos partes. La primera, a nivel de cantera y como claro suplente de Casillas cuando accedió al primer equipo. La segunda, ya en su madurez, con la confianza de Mourinho primero y Ancelotti después para pelearle el puesto - y ganárselo - al capitán merengue.

Su primera etapa

El gallego valoró su esfuerzo para llegar a dónde ha conseguido llegar: "Desde que era joven he dado el máximo. Me siento orgulloso de lo que he conseguido, que ha sido a través del esfuerzo. Por mi procedencia parecía complicado llegar a ser profesional, pero la llamada del Real Madrid cambió esa dinámica", afirma Diego.

Diego López: "Cuando llegué me sentí muy verde, y tuve que echar muchas horas extra para prepararme"

El de Lugo comenta sus primeros pasos en Valdebebas: "Cuando llegué me dí cuenta del nivel que había entre mis compañeros. Yo me sentía verde, y tuve que echar muchas horas extra para poder prepararme". Su proceso de adaptación se hizo más sencillo gracias a la aparición del que todavía hoy es uno de sus grandes amigos: "Arbeloa es una persona verdadera, además de un gran profesional. Lo ha conseguido todo, y lo ha hecho a través del esfuerzo. Es un amigo al que tengo mucho cariño".

Diego formó parte del penúltimo equipo del Castilla que logró el ascenso. Junto a los Soldado, Rubén o Arbeloa, el gallego jugó en el Bernabéu la fase de ascenso: "No lo había pisado hasta el momento, tan lleno de gente que impresiona", afirmó.

Ascenso y su mejor momento

Tras esto, Diego recibe la llamada del primer equipo: "Para mí, no hubo nada más emotivo que verme calentando en el Bernabéu con el Madrid. No es una sensación fácil de explicar, es algo que se me quedará siempre en el recuerdo. Luego llegó mi debut, una gran experiencia que hacía realidad un sueño". 

Diego López: "Apareció el Villarreal y me abrió una de las etapas más bonitas de mi vida"

Con dos años siendo suplente, y con toda la carrera por delante, llega el momento en el que Diego decide buscar fuera lo que no está obteniendo en casa: "Apareció el Villarreal, para abrirme una de las etapas más bonitas de mi vida. Pellegrini apostó por mí, y aunque no me puso las cosas fáciles fueron años muy buenos, tanto a nivel personal como en el grupo".

Pero la gran etapa del 'Submarino' finalizó con un triste descenso, y también la de Diego López en Castellón. Tras un paso raro por Sevilla de apenas seis meses, recibió una llamada inesperada: "Me costó asimilarlo. Fue una gran oportunidad, sentía que era el momento apropiado para volver al Real Madrid. Me sentía maduro, con confianza, y Mourinho me dio la fuerza necesaria para saber lo que querían de mí".

Vuelta a casa

Diego comenzó entonces un período de gran satisfacción personal, pero a la vez convulso: "Mourinho es una persona diferente al resto. Con su mirada, con lo que dice, te lleva hacia dónde él quiere". Al mismo tiempo, el gallego revela que no todo fueron facilidades: "Él era claro. Me dijo que la temporada pasada había intentado mi fichaje, pero que no era su niño bonito. Que no me lo pondría fácil. Él siempre me decía que pondría al que viera mejor en los entrenamientos".

Diego, sobre Mourinho: "Él no tenía nada contra Casillas, simplemente ponía al que mejor veía en los entrenamientos"

Entre él y Casillas se formó entonces una pequeña disputa, que terminó mermando, según dijo el propio Diego, la relación entre ambos: "Desde que volví mi trato no fue el mismo. Sin faltarnos nunca el respeto y sin que se produjeran palabras en contra de uno u otro nunca, sí era evidente que la situación entre ambos era diferente".

A pesar de lo que se dijo, Diego asegura que los motivos de Mourinho para decantarse por él eran, puramente, deportivos: "Se habló demasiado. Yo sabía lo que iba a pasar, sabía que se me miraría con lupa cada partido, cada parada. Yo entrenaba duro, sabía por lo que él me decía que no tenía nada en contra de Casillas, que su decisión se basaba en lo que veía a diario. Mourinho era el escudo hacia el que se dirigían todas las críticas. Pero cuando él se fue, yo me convertí en la diana".

La Selección, Ancelotti y su 'escape' a Milán

Al año siguiente, llega Ancelotti, y sigue con la confianza puesta sobre Diego: "Casi nadie apostaba por mí y aún así él lo hizo. Yo aguantaba las críticas, pero me dolía ver la imagen del club y del propio socio". A pesar de la distancia, Diego rompe una lanza en favor de todos sus compañeros incluido como no podía ser de otro modo, Casillas: "Este debate ha hecho mella en la afición, y no es buena esta tensión. Aunque esté lejos me siento madridista, y pido respeto para todos mis compañeros y por supuesto también para Casillas, que se lo merece".

Para cerrar el círculo, Diego dejó una reflexión: "Algún día podré contarle a mis nietos que tuve una competencia directa con Casillas, un mito, por un puesto". Y si Diego habla desde la distancia es porque en el pasado verano recibió una llamada: "Ancelotti me dijo que había hablado con Inzaghi. Me querían, y yo sabía que había llegado Keylor. Les pedí (a Ancelotti y a Vecchi) informes sobre el equipo y ellos me hablan muy bien. Yo podría haberme quedado, tenía cuatro años más, pero me sentía capaz de seguir jugando".

En la recta final de la charla, Diego repasó su paso por la selección, de la que salió antes del Mundial de Sudáfrica, del que se quedó fuera en favor de Valdés. El gallego se sintió mal por cómo se hicieron las cosas: "Igual que estoy agradecido a Del Bosque por llevarme, estoy decepcionado por su modo de actuar cuando me dejó fuera. Le faltó humanidad. Me llamó muy frío para decirme que me quedaba fuera, y desde entonces no me volvió a llamar. Hubiera agradecido algo de interés por parte de la Federación, me dejó tocado. Lo acepté, porque había otro compañero que lo merecía tanto como yo. Lo respeto, pero me decepcionó a nivel individual".