Tarde de calor y poco juego en el Santiago Bernabéu. A pesar de todo, el Real Madrid consiguió llevarse una victoria importante por lo costoso de la misma ante un sorprendente, por el buen papel realizado, del Granada, que borró de un plumazo la mala imagen que dejó el pasado año en el que cayó por 9-1, y que en esta ocasión puso en algo más que aprietos al cuadro merengue.

Sandoval y Benítez se saludaron al inicio del choque, que comenzó con un merecido espacio para algunos refugiados sirios.

El Real Madrid invitó a Uosama Alabed Almohsen y sus hijos Zaid y Mohammad al Bernabéu. Los refugiados sirios que sufrieron la zancadilla de la reportera húngara llegaron a Madrid y acudieron al feudo blanco para presenciar un partido del equipo de sus amores.

Además, y como viene siendo habitual en las últimas jornadas, los dos equipos saltaron al verde con camisetas de apoyo a los refugiados.

Con la baja por lesión de Sergio Ramos, Marcelo asumió galones de capitán desde el inicio por primera vez en esta temporada.

Lucas Vázquez fue el elegido por Rafa Benítez para sustituir a Bale en el once, echado en banda derecha aunque luego también se cambió a la izquierda.

Isco volvía a ser de la partida. El malagueño no tuvo su mejor tarde, pero en la segunda mitad asistió con un gran centro a Benzema para lograr el primer y único tanto del partido.

Sorprendió el Granada en el inicio con un plentamiento ambicioso y buscando al Madrid arriba. El gran controlado del centro del campo nazarí fue un Krhin imperial durante todo el primer acto.

La presión del Granada tenía maniatado a un Cristiano que apenas entró en juego en el primer tiempo.

A pesar de todo, el luso dispuso de alguna ocasión clara que no obstante no logró convertir en gol.

El Granada por su parte no se amilanaba, e incluso llegó a hacer un gol, aunque posteriormente sería mal anulado por el linier por fuera de juego.

El peligro lo llegaban El Arabi y un Success que había obligado a Benítez a cambiar de banda a Lucas Vázquez para que ayudase a Marcelo en labores defensivas.

Pero en el tramo final del primer tiempo el Madrid creció y arrinconó a su rival. Ahí entonces apareció un imperial Andrés Fernández, que mantuvo a los suyos en el partido.

Acababan entonces unos primeros 45 minutos en los que el Madrid no se había mostrado tan solvente como en anteriores encuentros, en el que Luka Modric era el único que había brillado por encima del resto.

En la segunda parte, el Madrid no cambió en su manera de afrontar el partido, pero sí se encontró con el acierto. Una jugada de Isco por izquierda la culminó por el centro Benzema, abriendo la lata.

Los compañeros fueron a saludar al galo por el gol, el primero del encuentro.

Lo intentaba el Madrid con el juego aéreo, pero el Granada se defendía de manera notable sin permitir que el cuadro blanco ampliase su diferencia.

Pero el Madrid ya no creaba ocasiones clara. Era, en cambio, el conjunto andaluz el que llevaba peligro. Y entonces apareció la figura estelar de Keylor Navas.

Le dio minutos Benítez a sus suplentes en la segunda mitad. Cheryshev debutó tras tres jornadas sin entrar en la convocatoria, con la camiseta del Madrid.

También Kovacic ingresó en el campo, dándole descanso a Kroos nada más empezar la segunda parte.

Lo intentaba Sandoval con los cambios, buscando dar la sorpresa y empatar el choque.

Pero el Madrid, gracias al papel de Navas, se mantuvo firme en el partido. Finalmente, y aunque no fue un encuentro brillante, los blancos aguantaron en casa los tres puntos, y meten presión al Barcelona.

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