El inicio de 2015 para Jesé no trajo mejores noticias que el año anterior, en el que cayó lesionado. El canario se encontraba  totalmente recuperado de la grave lesión que había sufrido hacía un año atrás, pero tardó en encontrarse a sí mismo. Las pocas oportunidades y la escasez de minutos que le dio Ancelotti hicieron que el canterano blanco no terminara de coger un buen tono físico ni tampoco la chispa necesaria que un jugador de sus características necesita. El técnico italiano apenas contó de inicio con Rodríguez y solo le dio minutos sueltos al final de algunos partidos que no dieron beneficio ni al equipo ni al propio jugador. Carletto quiso usarlo como revulsivo, pero el jugador, sin un tono físico adecuado, no pudo ser útil. Jesé estaba lento, sin esa arrancada ni punta de velocidad que le caracterizaron y sin la confianza necesaria para recuperar su fútbol y aportar al equipo. De esta manera, el ‘20’ blanco cerró su segunda temporada como miembro del primer equipo dejando muchas dudas y sin tener la certeza de que volvería a recuperar su mejor nivel. Un inicio de 2015 y un final de temporada para olvidar.

Una buena pretemporada hizo que Jesé se quedara

Jesé llegó al mercado veraniego con dudas. Dudas que también existían en el propio club, pues se valoraba si lo ideal era que el jugador saliera cedido en busca de los minutos que no tendría como jugador del Madrid. Finalmente, su gran pretemporada, la salida de Chicharito y el no fichaje de otro delantero hicieron que Benítez optase por quedárselo en la plantilla para que compitiera con el resto de atacantes y fuera un jugador importante en la rotación. Durante los amistosos de pretemporada, las molestias de Benzema hicieron que Benítez le diera muchos minutos  jugando como hombre más adelantado. Pese a no marcar muchos goles, Jesé sí dejó muy buenas sensaciones. El delantero blanco volvió a dejar muestras de todo el fútbol que lleva dentro, haciendo recordar al Jesé pre lesión, aquel futbolista con descaro, atrevido, rápido y desequilibrante en el uno contra uno. El canario por fin parecía encontrar hueco en la plantilla y un rol de jugador importante, pues podría ser el primer relevo para Benzema, Bale o Cristiano Ronaldo además de darles descanso a estos tras las anunciadas rotaciones del nuevo entrenador.

Jesé ha sido el último recurso para Benítez, pese a tener buenos minutos

Sin embargo, el inicio de temporada ha sido una montaña rusa para Jesé. El canario comenzó como titular en el primer partido de Liga, pero luego desapareció quedándose cuatro partidos seguidos sin jugar para luego alternar banquillo y minutos sueltos hasta llegar al partido contra el Levante. Es ahí donde Jesé encadena varios partidos seguidos sumando minutos y mostrando un nivel muy alto. Ante PSG, Celta, Las Palmas y nuevamente PSG, el canterano salió de titular y dejó muy buenas sensaciones, siendo sin lugar a dudas su mejor momento post lesión. Benítez le dio confianza y él respondió jugando muy buenos partidos. Pese a ello, volvió a alternar varias semanas seguidas sin jugar con otras en las que tuvo algunos minutos sueltos para acabar despidiendo el año sin minutos, pero con muchas mejores sensaciones que con las que arrancó el año.