Una de las líneas que más sufrió el pasado curso en el Real Madrid fue el centro del campo. Las constantes lesiones de jugadores como Luka Modric o Sami Khedira y la falta de afianzamiento de otros como Illarramendi y Lucas Silva, provocaron que Toni Kroos tomara la batuta del juego merengue aunque echando de menos la figura de un apoyo de confianzas y acumulando muchos minutos sin apenas descanso. El caso de Khedira fue especialmente particular, un jugador que lo había sido prácticamente todo en la época Mourinho junto a Xabi Alonso, había pasado desapercibido con la llegada de Carlo Ancelotti al conjunto merengue.
Participación intermitente
Como se apuntaba anteriormente, la presencia del mediocentro bávaro fue irregular. Constantes lesiones refutadas por el club argumentaban las ausencias de Khedira a las órdenes de Carletto, pero la verdad era que el jugador, cuyo contrato finalizaba a final de curso, estaba con la mente cada vez más lejos de Concha Espina. Por ende, cada vez que el internacional germano saltaba al terreno de juego, se le notó perdido en el 4-3-3 del técnico transalpino y acusando en exceso la falta de ritmo para acompañar -habitualmente- a su compatriota, Toni Kroos.
El mediocentro natural de Stuttgart finalizó la temporada con un total de 17 encuentros repartidos entre Liga BBVA, Mundialito de Clubes, UEFA Champions League y Copa del Rey. Sin embargo, Khedira se iría sin estrenar su casillero goleador en los 621 minutos que vistió la camisola madridista. El actual campeón del mundo cerraba así su peor temporada con el Real Madrid, aunque ya en la anterior, la primera de Carlo Ancelotti, tan solo disputó 18 partidos y anotó un único tanto.
El runrún se confirma
Tan pronto como finalizó la temporada ante el Getafe CF en el Santiago Bernabéu, comenzaron a gestionarse las salidas y llegadas en Concha Espina. La primera fue la de Carlo Ancelotti, que después de no haber logrado ningún título en comparación con el 2014, acabó siendo uno de los señalados por la debacle merengue acaecida desde principios del 2015. Tras él, varios jugadores salieron del club, como por ejemplo Sami Khedira. El internacional alemán concluía su contrato con el Real Madrid y ponía rumbo a Italia para unirse totalmente libre al verdugo de los merengues en las semifinales de la UEFA Champions League, la Juventus de Turín.
El centrocampista germano comenzó con 'una lesión miotendinosa de segundo grado en el bíceps femoral', como afirmaba la Juventus de Turín, que le apartó del equipo durante los primeros meses de competición. Tras ello, Khedira suma un total de 431 minutos en seis partidos, donde ha conseguido dar una asistencia y marcar un gol; el conjunto transalpino ocupa actualmente la cuarta posición a tres puntos del líder, el Inter de Milán. Además, el nuevo mediocentro bianconero ha jugado en dos ocasiones a las órdenes de Massimiliano Allegri en UEFA Champions League.