El efecto Zidane se borró de un plumazo cuando Griezmann ponía el 0-1 definitivo en el marcador del Santiago Bernabéu. Las carencias del Madrid de Benítez afloran en el Madrid del galo. Cuando un equipo grande se entromete en el camino de los blancos, el resultado siempre es el mismo, un partido insulso, sin gracia y que, normalmente, se acaba perdiendo.

Muchos presagiaban que esto podía suceder, que todos los partidos hasta ahora eran meros espejismos, pero gracias a los resultados, la confianza se sostenía. Pero el derbi, no es un partido más, aunque así lo quiso ver Zizou, y fue cuando se demostró los problemas que atesora el conjunto merengue.

El Madrid salió con todo para demostrar que son un equipo nuevo, revitalizado y con hambre de ganar y de pelear hasta el final, o al menos es lo que pretendían. El partido arrancó con los dos equipos midiéndose. Los blancos con la pelota y el Atlético cómodo con su planteamiento y sin pasar apuros en ningún momento.

El Cholo ganó la partida táctica a Zidane

Las consignas eran claras por parte de los dos entrenadores. Zidane quería aguantar la bola casi a ultranza, sin arriesgar un solo pase y siempre jugando fácil. Algo que al principio parecía que el Madrid estaba consiguiendo. Por su parte, el Cholo no lo podía tener más claro, aguantar atrás hasta que el contrario cruzara la línea divisoria, momento en el que los medios rojiblancos comenzarían a presionar, sobre todo a Modric y a Kroos. Una tarea que llevaron a cabo perfectamente Koke, Gabi, Griezmann y un espectacular Augusto Fernández. Incluso este, hizo las dotes de marcador al hombre de Modric, el jugador que tenía que controlar todo para el Madrid, en la salida de pelota del croata.

Zidane y Simeone en el área técnica. Fotografía: Dani Mullor / VAVEL.
Zidane y Simeone en el área técnica. Fotografía: Dani Mullor / VAVEL.

El trabajo sin balón del Atlético de Madrid era impecableEl Atleti ahogaba al Madrid que se quedaba sin ideas, consiguiendo recuperar bastante rápido el balón, una vez el Madrid entraba en terreno rojiblanco, pero cuando recuperaban, esa perfección se convertía en puro desastre, sino, quien sabe cual hubiese sido el resultado al término de la primera mitad.

Así siguió durante toda la primera mitad, en la que el Madrid no consiguió toser al conjunto de la Ribera del Manzanares. No había señales de vida del ataque madridista, Benzema no aparecía, Ronaldo estaba cambiándose de banda constantemente para intentar algo nuevo, pero sin resultado. James en uno de sus partidos más grises de toda la temporada, en definitiva, no parecía abocar nada bueno.

La segunda parte hundió al Madrid

Los jugadores blancos salieron en la segunda mitad desganados, con un nivel de precisión bastante ínfimo e incluso parecían cansados. El Atleti ganó en confianza con la pelota y en precisión. Se acumulaban los problemas para el equipo de Concha Espina, que perdía a Karim Benzema para toda la segunda parte, y además tenía que preocuparse por las contras del Atlético, que le podían hacer mucho daño.

Según avanzaba el partido, el Atleti estaba más arriba, solo un par de ocasiones de Cristiano inquietaron a Jan Oblak. Koke aparecía más ofensivamente y Griezmann avisaba a Keylor.

Griezmann provoca la catástrofe

Griezmann celebrando el gol. Fotografía: Dani Mullor / VAVEL.
Griezmann celebrando el gol. Fotografía: Dani Mullor / VAVEL.

Corría el minuto 53, y Filipe Luis llegaba a orillas del área para dar un pase atrasado que Antoine Griezmann conseguía culminar para marcar el primer –y único- gol del partido.La balanza se tornó y era el Atlético de Madrid el que dominaba el encuentro desde su labor defensiva

La pasividad en esos momentos del Madrid en defensa fue bastante significativa, en varias jugadas, la del gol incluida, tanto Kroos como Modric, Isco o Sergio Ramos no fueron ningún problema para los delanteros colchoneros.

Zidane cambió a James y a Isco para poner a Lucas Vázquez y a Jesé, casi una delantera del Castilla, contando con un Borja Mayoral en punta.

Borja Mayoral fue lo único positivo

Solo el chaval el día de su debut puso la buena nota en este partido nefasto para todo el madridismo, dos arrancadas que fueron ovacionadas por el público asistente al Bernabéu. Más allá de eso, un equipo sin ideas, sin acierto pero que si demostró que quería intentarlo, algo que obviamente no suele bastar para ganar este tipo de partidos. 

Borja Mayoral en su debut con el primer equipo. Fotografía: Dani Mullor / VAVEL.
Borja Mayoral en su debut con el primer equipo. Fotografía: Dani Mullor / VAVEL.

Finalmente, y otra vez, el Atlético de Madrid vencía en Chamartín por 0-1 y deja patente el terrible estado en el que se encuentra del Madrid desde aquella increíble racha en diciembre de 2014.