Como si de un estudiante que va con lo justo al examen de fin de curso, el Real Madrid tendrá que acudir a septiembre. O en su caso, al partido de vuelta para resolver la eliminatoria con el Manchester City, que en su primera entrega no dejó un fútbol vistoso, y sí la emoción de un 0-0 que hará que el encuentro del Santiago Bernabéu cobre una relevancia aún más importante de la que ya de por sí se le presuponía. Allí, en el feudo merengue, se resolverá la identidad de uno de los dos finalistas.

Se escapó la sentencia

No pudo el conjunto blanco sacar un resultado que encaminase la eliminatoria en territorio inglés. "Tuve la ocasión, pero el portero se me echó muy encima, hizo una gran parada", lamentaba Pepe ya en zona mixta una vez concluido el partido. El City dominó el primer tramo de encuentro, pero con la salida de Silva del terreno de juego tras caer lesionado, las opciones de los citizens cayeron de manera notable, y su incidencia en el juego se vio resentida.

Hart evitó que Casemiro primero y Pepe, en la más clara, después, le dieran ventaja en el partido y la eliminatoria al Madrid

Fue entonces, y especialmente en la segunda parte, cuando el Madrid se creció. De la mano de un gran Gareth Bale, incisivo y protagonista, que junto a los pases de exterior de Modric, la incansable presencia de Lucas, y las apariciones esporádicas - aunque no demasiado acertadas - de Marcelo en ataque comenzaron a darle motivos a los locales para temer por la integridad de su red.

El primero en avisar fue Jesé. El canario, con un tremendo salto y posterior cabezazo, se encontró con el larguero de la portería de Joe Hart, que no fue capaz a pesar de su estirada de rozar el cuero. El balón golpeó en el poste y se marchó fuera, con el canterano blanco ya celebrando el gol. Acto seguido, y también de cabeza pero a la salida de un córner, Casemiro encontró hueco para dirigir su testarazo hacia el gol, pero ahora sí, el cancerbero inglés, fue protagonista.

Hart aparece para salvar a los suyos

Comenzaban los cinco minutos que le darían a Hart la vitola de héroe en la prensa de su país. El cancerbero inglés sacó un pie milagroso al cabezazo del mediocentro brasileño, despejando la ocasión. Pero la más clara estaría por llegar. Peinó Ramos en un nuevo saque de esquina para dirigir el balón a Pepe, sólo en la frontal del área pequeña. Esa jugada, la que lamentaba posteriormente el central luso, fue la más cercana al gol que tuvo el Madrid, pero Hart achicó rápido y consiguió evitar que el portugués encontrase portería, y sí su pecho.

El torso de Hart, y el estallido de la grada. El City, que no llegó a chutar entre los tres palos con verdadero peligro para la meta de un Keylor Navas prácticamente inédito en todo el partido, había pasado sus peores momentos. Un disparo de Bale que se marchó por poco desviado, y un penalti no pitado sobre Lucas que protestó en bloque el Madrid fueron las otras ocasiones de las que dispusieron los blancos.

El miedo a perder atenazó por momentos a ambos conjuntos. En otro escenario, el cuadro de Zinedine Zidane había ido sin pausa hacia la portería rival, pero parecían tener una marcha menos metida, a conciencia, para evitar que el tránsito se les complicase. Siempre con Casemiro y Pepe como principales referencias defensivas, cuajando ambos sendos notables encuentros en dicha parcela, el Madrid no salía con siete hombres como habitualmente hace al ataque. O Carvajal o Marcelo guardaban siempre la posición, y dejaban a los dos interiores junto a los tres de arriba para desenvolverse en la tela de araña que ejecutaban Fernando y Fernandinho.

Sin la BBC pero a una victoria de Berlín

La falta de Cristiano desde el inicio y Benzema a partir del descanso fue notable. A pesar de que Lucas Vázquez realizó un enorme despliegue físico, y que Jesé gozó de una ocasión manifiesta de gol, el equipo notó la ausencia de dos de sus puntales ofensivos, sus dos máximos goleadores, que dejaban a la BBC sin posibilidad de emitir de manera apropiada.

El Madrid ha ganado todos los partidos de esta temporada en Champions que ha disputado en el Bernabéu

La entrada de Isco habría oxigenado al centro del campo, pero el de Arroyo de la Miel ingresó al campo a escasos minutos del final. Zidane no agotó sus cambios, y James Rodríguez volvió a quedarse sin jugar. Tampoco Pellegrini cumplió el cupo de permutas, dándole entrada a Ihenacho y Sterling únicamente, el primero obligado, viéndose superado en la segunda mitad y sin terminar de reaccionar.

Sin brillar, sin deslumbrar, el Madrid dejó escapar una buena oportunidad de encaminar una eliminatoria que, no obstante, tiene de cara. Una victoria en el Santiago Bernabéu les mete en la final de la Champions, y a eso se aferran los merengues. La afición volverá a agolparse en las calles cercanas para presenciar la llegada del autobús del equipo blanco, y dentro del campo llevarán en volandas a los suyos.

En casa, el Madrid no pierde en Champions desde que lo hiciera el pasado año 3-4 ante el Schalke en los octavos de final, habiendo encadenado cinco triunfo consecutivos esta temporada a costa de Malmö, Shakhtar, PSG, Roma y Wolfsburgo; y no hay sexta mala.

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Sobre el autor
Manuel Vergara
Coordinador y redactor de la sección del Real Madrid y su cantera | Contacto: [email protected]