Bale volvió a marcar en el segundo encuentro de la Eurocopa de Francia y lo volvió a hacer de libre directo, una especialidad en que el galés está demostrando que es uno de los mejores futbolistas del mundo. Ese gol permitió ponerse por delante a los dragones rojos pero no pudo traducirse en una victoria, ya que Vardy y Sturridge, en el último minuto, le dieron la vuelta al marcador. Gales hizo un partido basado en estar bien replegados en defensa, intentando hacer valer el gol de Bale, es por eso que el jugador del Real Madrid no pudo brillar en exceso en ese fútbol ofensivo que tanto le gusta practicar.

Dos goles de libre directo lleva en esta Eurocopa

En el fútbol aéreo también destacó el de Cardiff que disputó y ganó muchos balones, entre ellos uno al final del partido que pudo significar el empate pero su cabezazo se marcho desviado. En defensa estuvo muy solidario, siendo prácticamente un centrocampista más, y ayudando a cubrir las peligrosos y constantes subidas del veloz Kyle Walker. Eso produjo que llegará algo justo de fuerza a los últimos minutos del encuentro y que se le viera con una carrera lenta y pesada en las sus últimas participaciones del encuentro. Lo que se pudo comprobar en el partido es que Gales depende de forma excesiva de su hombre estrella y si Bale no desequilibra el resto es incapaz de hacerlo. En estos dos partidos el galés ha logrado marcar y brillar pero la presión que tiene de saber que no puede realizar un mal partido ya que sino su selección perderá muchas opciones de ganar puede pasarle factura a nivel mental durante lo que resta de Eurocopa.

El siguiente partido de Gales será ante Rusia, un duelo clave para que la selección británica puede lograr el pase a los octavos que tan cerca tuvieron durante una gran fase del encuentro ante Inglaterra.