El Real Oviedo llega al partido de este domingo (12 de la mañana, Nou Estadi) frente el Nástic de Tarragona en medio de la rareza. Si bien la posición que ocupa el equipo carbayón invita al optimismo de cara al ascenso, el último mes, a raíz de la dimisión de Sergio Egea, ha traído consigo cierta inestabilidad entre el equipo y la afición que los azules quieren revertir con resultados. Y es que el bagaje desde la salida del técnico argentino es muy irregular.

Dos derrotas y dos victorias, y una muy mala imagen de juego, a excepción del partido frente a la Ponferradina en el Carlos Tartiere, no ha ayudado a que los de Generelo consigan la unidad que se precisa en este tramo decisivo de la temporada.

Olvidando ganar a domicilio

Por todo ello, el partido frente al Nástic se plantea como una prueba de fuego para los azules por varias razones. La primera, por enlazar dos victorias consecutivas que refuercen el lazo de unión con la grada. La segunda, porque los carbayones no ganan fuera de casa desde hace cuatro meses. Y es que para recordar el último triunfo a domicilio del Oviedo, tenemos que retroceder hasta la jornada 17, en la que los azules derrotaron 1-2 al Mirandés con sendos goles de Toché.

El Real Oviedo no gana lejos del Tartiere desde la jornada 17, en Anduva ante el Mirandés.

Desde entonces, el balance fuera de su estadio se reduce a cinco empates y tres derrotas. Y la tercera razón, por el hecho de que ganar al Tarragona (cuarto clasificado e igualado a 52 puntos con los carbayones) significaría dar un puñetazo encima de la mesa y acabar de acreditarse como la tercera alternativa al ascenso directo, después de Alavés y Leganés, ambos alejados a 5 puntos tanto del Nástic como de los azules.

Bajas en ambos conjuntos

Para este trascendental choque, David Generelo no podrá contar con Néstor Susaeta tras ver el pasado domingo la doble amarilla. El club azul ha solicitado al Comité de Apelación la retirada de una de las dos tarjetas recibidas, pero sus recursos han sido desestimados. A la baja del eibarrés por sanción, también se le suma por lesión la ya sabida de Borja Gómez, y de manera reciente la de Edu Bedia, Diegui, Héctor Font y Koné.

Este último sufre un esguince en el hombro izquierdo, debido a un lance fortuito en el pasado choque frente al Numancia, que le mantendrá alejado del terreno de juego en torno a dos o tres semanas. Además de los nombrados, se quedan en Oviedo por decisión técnica Josete y Cristian Rivera.

Pablo Marí y Iago Bouzón son las bajas con las que cuenta el Gimnástic de Tarragona para el trascendental partido ante el Real Oviedo.

Por parte del Nástic, el técnico Vicente Moreno no podrá contar para este partido con sus dos ejes de la zaga: Pablo Marí y Iago Bouzón. El primero de ellos arrastra problemas musculares en el isquiotibial derecho, mientras que el segundo es baja por acumulación de tarjetas.