La Real Sociedad no pudo iniciar la fase de grupos de la Liga de Campeones con una victoria, al perder por 0-2 ante el Shakhtar Donetsk. A pesar de disputar una buena primera parte, en la que fue el equipo que llevó la batuta del encuentro, su rendimiento cayó en la segunda y el conjunto ucraniano lo aprovechó para llevarse los tres puntos y bajar a los donostiarras de la nube.

El día ya comenzó mal, con la lesión de Zurutuza que le obligó a quedarse en la grada. Ros entró en la convocatoria y Pardo fue el encargado de sustituirle en el campo. Este contratiempo no afectó a la ilusión de la afición blanquiazul, que llegaba a Anoeta con ganas de disfrutar de la mejor competición mundial a nivel de clubes, y confiada de que su equipo hiciera un buen papel.

El inicio del choque hacía presagiar un buen desenlace para los intereses realistas. El equipo de Arrasate presionaba bien arriba y creaba peligro, y para el minuto cuatro ya había tenido dos oportunidades de gol. La primera, en las botas de Griezmann, y la segunda en la cabeza de Xabi Prieto.

Pero en las últimas jornadas los atacantes realistas parecen tener la pólvora mojada, ya que la efectividad que mostraron el año pasado y en los primeros partidos de la presente temporada parece que la han perdido. En el cuarenta fue Pardo el que la tuvo, tras una gran pared dentro del área que le dejó ante Pyatov, pero tras la que llegó muy forzado y no acertó al definir.

Polémica antes de llegar al descanso

Un minuto más tarde, llegó la jugada polémica del encuentro. Xabi Prieto recibió cerca del área y fue derribado más tarde, justo sobre la línea, por lo que el colegiado debió de haber pitado penalti. El árbitro pitó falta, y el disparo de Rubén Pardo fue despejado por la barrera.

En la segunda parte todo cambió. El Shakhtar fue haciéndose con la pelota y poco a poco la Real comenzó a sufrir. El primer aviso claro fue el gol anulado a Tyson, que a pesar de estar claramente en fuera de juego metió el miedo en el cuerpo de los blanquiazules. Antes, Seferovic tuvo una clara ocasión, pero Pyatov le tapó bien y le dejó sin ángulo.

Poco después llegaría el primer gol de Teixeira, al fusilar de dentro del área a Bravo. Srna puso un magnífico centro, Douglas Costa la dejó atrás de tacón y el bigoleador del encuentro puso a su equipo por delante en el marcador. Anoeta enmudeció, pero poco después recuperó fuerzas para ayudar a su equipo a conseguir el empate.

Sin embargo, los intentos por marcar llegaban más desde el corazón que desde la cabeza, y por tercer partido consecutivo los de Arrasate no consiguieron la fluidez que les caracteriza. Entraron “Chory” Castro, Agirretxe y Granero con el objetivo de conseguir al menos un empate, pero no fue suficiente. El delantero usurbildarra disputó sus primeros minutos esta temporada, tras la rotura fibrilar que sufrió en agosto, pero no dispuso de ninguna ocasión clara para marcar. Granero, por su parte, protagonizó una de las peores noticias del encuentro, ya que se retiró lesionado de la rodilla, y su lesión no tiene buena pinta.

Sentencia visitante al final

Salvo un cabezazo de Vela al larguero, los blanquiazules no llevaron demasiado peligro al área visitante, y en el ochenta y siete Teixeira volvió a marcar con un gran disparo desde la frontal, sentenciando el choque, y dejando tocada a la Real Sociedad, que ve cómo se complica la clasificación a la siguiente fase.

A pesar de ello, no hay que perder la cabeza. El primer tiempo fue bueno y el resultado bien podría haber sido otro si el colegiado hubiese señalado el penalti sobre Xabi Prieto en la primera mitad. Arrasate debe conseguir que sus jugadores recuperen la confianza y la alegría que han perdido en los últimos tres choques para que su equipo vuelva a mostrar el nivel ofrecido en la previa ante el Lyon. La liga es lo que da de comer, y ahí es donde el equipo debe volver a demostrar las virtudes que le llevaron el año pasado a la cuarta plaza para y, después, tras jugar ante Málaga, Barcelona y Sevilla, sacar algo positivo de Leverkusen que permita volver a soñar en la Liga de Campeones.