Dicen que una buena defensa hace un buen ataque. Quizás ese sea el problema de los malos resultado que últimamente está cosechando la Real Sociedad. La zaga blanquiazul parece más liviana de rebasar que nunca. Como se ha podido comprobar en lo que llevamos de liga BBVA, la Real no ha dejado su portería imbatida en ningún partido y no es por fallos de los guardametas, normalmente, si no por fallos defensivos. 

La Real atraviesa uno de sus peores momentos, defensivamente hablando, y quizás ese sea el motivo de la incapacidad de encontrar el equilibrio en el equipo. Íñigo Martínez, el jugador con el que tanto se especuló su salida al Real Madrid ha bajado mucho su forma física, pero no sólo eso. El jugador se caracterizaba por un buen remate de cabeza, además de su colocación como eje en la defensa txuri urdina. Pero este año no ha sido así. Íñigo está perdido por el campo, llega tarde a los cruces, en los córner no alcanza a despejar, sin ir más lejos en el gol de Dos Santos en el partido de esta mañana en Anoeta. No sabemos que le pasa al joven central, pero la pasada campaña él era el dueño de la defensa. Esta temporada el equipo le está reclamando a gritos que vuelva a su función cuanto antes. 

Al igual que Íñigo, nos encontramos con Elustondo un jugador que habitualmente ha jugado en la medular del equipo y este año, ha pasado a jugar como central. Ya sea porque es una posición diferente a la habitual o porque aún no ha terminado de adaptarse al puesto, el caso es que con el bajón de forma que tiene Íñigo Martínez, Elustondo debería de dar esa solidez defensiva, que actualmente no ha dado. Al pasar a jugar en el centro de la defensa Elustondo relegó al banquillo al jugador que ocupaba esa misma posición la campaña anterior, Mikel González. Un Mikel que esta temporada está desaparecido. No le hemos visto jugar con la Real, ya que todos los minutos se los está quitando el joven central reconvertido. ¿Puede deberse la suplencia del experimentado y veterano Mikel a su falta de forma? Puede que sea por eso o por un millón de razones más, pero el caso es que hace falta alguien como él, con experiencia, para consolidar la defensa definitivamente, en vista de que el experimento de Elustondo no ha salido lo bien que Jagoba esperaba. Aún así parece que el técnico apuesta por la adaptación de Elustondo en la demarcación y la suplencia de Mikel. 

En adicción a estos hechos, tenemos que destacar las cesiones de Cadamuro y Raúl Navas, este último a un club vecino, el Eibar. Viendo la falta que hace una estabilidad en la zaga de la Real, cualquiera de estos dos jugadores podría ser válido de cara a la próxima temporada. Cadamuro ya ha jugado con la Real Sociedad y puede volver a hacerlo sin problemas si los esquemas defensivos de Arrasate no encajan como deberían. En el otro lado, está Raúl Navas, adquirido esta temporada y cedido al Eibar, conjunto con el que había jugado los últimos años. El sevillano, es un central que posee buen juego de pies y un poderío cabeceador que ayudaría mucho a la defensa. 

Con estos jugadores tan diferentes y con talento de sobra para jugar en los planteamientos del técnico vizcaíno,  sorprende que el conjunto txuri urdin sólo disponga de tres centrales, más Elustondo reconvertido. Si Arrasate se acaba dando cuenta de que la zaga está muy debilitada con sus últimos planteamientos, tendrán alguna opción de remontar poco a poco la mala situación en la que se encuentran, si por el contrario no se da cuenta, la Real puede pagar muy caro esos desajustes atrás