Es evidente que las declaraciones públicas realizadas después de la derrota ante el Getafe por Xabi Prieto, Carlos Vela y Markel Bergara están alineadas con la versión oficial de la Real Sociedad y de su directiva, la cual mantiene una serenidad impostada e impropia de la situación de crisis de juego que está viviendo actualmente el equipo y la tensión que se vive entre su masa social.

Difícilmente saldrá algún jugador de la Real Sociedad a criticar abiertamente la labor de Arrasate

Es verdad que los jugadores poco pueden hacer, además de esforzarse en ser mejores, para saltarse el guión establecido por la línea oficial. Difícilmente sería posible ver algún jugador que levantara la mano o la voz para criticar en estos tensos momentos la labor que Jagoba Arrasate y la directiva están llevando a cabo. Poco hay que reprochar a esta actitud, principalmente, porque criticar públicamente la labor del entrenador les granjearía no pocos enemigos tanto dentro del vestuario como en el cuerpo técnico y pondría en riesgo su futuro como blanquiazul.

Pero estar con el técnico, pensar que es la persona idónea, lleva a los jugadores a una situación poco confortable. Si Jagoba Arrasate es el mejor entrenador para esta Real Sociedad, si es la persona adecuada para sacarle todo el rendimiento a este grupo de jugadores, ¿qué es lo que está fallando para que la Real Sociedad este mostrando tal pobre imagen? Hasta ahora nadie ha respondido a esta pregunta.

Xabi Prieto: "Estamos a muerte con el entrenador"

Ni el propio capitán de la Real Sociedad es capaz de responderla. Sus declaraciones diciendo que están "a muerte con el entrenador" no hacen más que sembrar más dudas, no ya solo en la capacidad del entrenador, sino también en la de los propios jugadores. Hablar de estar unidos, de trabajar, de apoyarse está muy bien, pero eso no gana partidos, hasta ahora por lo menos, y la Real Sociedad necesita como el comer conseguir puntos para escalar puestos en la clasificación y ubicarse en la zona alta de la tabla.

Xabi Prieto no está pasando los mejores momentos vistiendo la camiseta txuriurdin

Si Jagoba no es el principal culpable, es lógico que los aficionados giren la cabeza hacia los propios jugadores. Son ellos los que saltan al campo y son ellos quienes siguen los dictados de su entrenador "idóneo", pero la cosa sigue sin funcionar y los aficionados se impacientan porque los resultados no llegan. El propio Xabi Prieto tuvo que escuchar pitos desde la grada cuando fue sustituido ante el Getafe, cosa más que lógica dado el rendimiento del capitán los últimos partidos así como la de la mayoría de jugadores de la plantilla.

Carlos Vela: "Estoy convencido que el entrenador es el ideal"

Carlos Vela tampoco está en su mejor momento de forma, al igual que muchos de sus compañeros. Según él, es la explicación a los males que afectan a la Real Sociedad: “Todo el mundo se acostumbra a lo bueno. Jugamos la Champions, nos clasificamos para la previa de la Europa League y la gente se piensa que vamos a estar siempre ahí, pero no siempre se puede. Esto le puede pasar a cualquiera, incluso a las mejores plantillas y ahora hay que demostrar de qué estamos hechos y que confiamos en todos: jugadores, cuerpo técnico y directiva. Los que estamos podemos salir adelante”.

No es de recibo afirmar que el malestar de los aficionados es por las altas expectativas que han puesto en este equipo

Lo que no parece de recibo es cargar con la responsabilidad de la crispación a los aficionados de la Real Sociedad. Según declaró Vela, las expectativas no siempre pueden ser las más exigentes, no se puede estar luchando por Europa todas las temporadas, pero de lo que se olvida es que actualmente la Real Sociedad está en la cola de la clasificación, presenta unos números de descenso y ha sido apeada por un equipo teóricamente inferior de la Europa League.

Y esta situación no es la consecuencia del malestar de los aficionados sino todo lo contrario. El malestar de los aficionados viene dado por la calidad que se le supone a esta plantilla, que cuenta con los fichajes más caros de su historia, que viene de demostrar que es mucho más de lo que están demostrando y que actualmente tan solo cuenta con cinco puntos de 24. Estas razones y no otras son las que han provocado que los aficionados estén decepcionados no ya solo con los jugadores sino también con su máximo responsable, Jagoba Arrasate, entrenador y director de todos ellos.

Unidad, trabajo, confianza... son palabras que sirvieron una vez, fueron argumentos válidos para superar ciertas circunstancias aunque hoy día ya han perdido todo su valor, están vacias de contenido. Se han convertido en una letanía para hacer frente, no ya a un mal resultado, sino a toda una racha que hunde sus raíces en la pasada temporada. Y a los aficionados se les ha agotado la capacidad de creer, de creer en que esto, con los mismos protagonistas, vaya a acabar y retornar a una situación no ya de Champions, sino normalizada en donde la Real Sociedad gane, pierda y empate, pero por lo menos sepa a lo que juega. Esa es la Real Sociedad que quieren los aficionados.