Paradójicamente, será el 8 de marzo, Día Internacional de la Mujer Trabajadora, cuando las jugadoras del Sant Gabriel o "SanGra", como se le llama cariñosamente, salten al terreno de juego Z6 para enfrentarse a la Real Sociedad. Lo harán casi a duras penas, con la incertidumbre de no saber si terminarán la temporada o no, de si podrán viajar al siguiente partido o no, pero con la dignidad suficiente de jugar los noventa minutos frente a la Real Sociedad y pelear por los tres puntos. Lo harán, además, habiendo renunciado a su sueldo para poder competir.

Será un día señalado puesto que su causa es la causa de todas las mujeres, de todas aquellas que quieren lograr un trabajo digno y vivir profesionalmente de aquello a lo que aspiran y porque el fútbol femenino no pasa, precisamente, por sus mejores momentos.

Los clubes de Primera División cada vez ofrecen mayor cobertura a sus secciones de fútbol femenino

Es cierto que cada día se están dando más pasos. El Fútbol Club Barcelona, por ejemplo, parece que ya se ha decidido a convertir su sección femenina en profesional a todos los efectos; los clubes de Primera División cada vez ofrecen más cobertura a sus categorías femeninas pero aquellos como el Sant Gabriel, el Oviedo Moderno o el Sporting de Huelva que no cuentan con una cobertura de un equipo profesional no tienen más que dificultades, primero, para asegurar su permanencia económica en la Primera División, y segundo, para retener a sus talentos y ser competitivas. Ahí como en la vida real, la última palabra la tienen los clubes poderosos.

Situación de extrema gravedad

La sección femenina del CE Sant Gabriel pasa por una situación extrema. La falta de ingresos así como de patrocinadores que puedan sufragar los numerosos gastos que se generan a lo largo de la competición afecta de forma descarnada al primer equipo pero, a su vez, de rebote, al resto de secciones del club catalán.

(Imagen: Sant Gabriel)

Tanto jugadoras como cuerpo técnico han renunciado a los cobros de sus sueldos para poder terminar la la competición

Antes del último desplazamiento a Huelva, la propia directiva del Club publicó una nota en la que manifestaba necesitar 20.000€ para cubrir como mínimo los desplazamientos del equipo, aunque esta cantidad ascendía al doble teniendo en cuenta los gastos y sueldos de las jugadoras y el resto de componentes de la plantilla. Tal es la situación a la que ha llegado el club que la primera gran decisión adoptada por la directiva ha sido la de suprimir todos los sueldos de las jugadoras y cuerpo técnico.

El motivo que ha provocado esta situación no es otro que Joan Llandrich, Presidente de la entidad y el único mecenas que ha costeado esta sección y que actualmente cuenta con 15 equipos, atraviesa una situación económica delicada y no ha podido hacerse cargo de los gastos quedándose el equipo sin presupuesto.

Viaje a Huelva y a Donostia

En esta situación la Junta se planteó la retirada inmediata del equipo de la competición oficial puesto que al conjunto catalán todavía le quedaba viajar a Huelva, Donostia, Zaragoza, Badajoz, Valencia y Bilbao. No obstante, decidieron mantenerse en Liga y luchar hasta el final y fue en ese momento, cuando de forma sorpresiva, apareció un sponsor imprevisto y pudieron trasladarse hasta Huelva para disputar la jornada número 20. El alojamiento onubense lo financió la cadena hotelera Secotel, que les adelantó el hospedaje que tenían pactado para final de temporada.

Familiares y amigos se han volcado con el equipo para poder recaudar fondos y cubrir los gastos

Superado el primer match ball, el SanGra decidió pelear y padres y madres de las jugadoras están organizando todo tipo de actos, desde un rastrillo solidario hasta un encuentro de todos los equipos, familias y profesionales que forman parte del club, para recaudar los fondos necesarios para, por lo menos, terminar la temporada.

Y en este objetivo, han vuelto a dar un pasito más, ya que este domingo estarán presentes en las instalaciones de Zubieta para jugar ante la Real Sociedad e intentar, tal y como declaró en su día su Presidente Joan Llambrich, mantener la categoría: "Estamos tan al límite que hemos anulado todos los pagos al personal del club pero si logramos la financiación mínima imprescindible, prometemos dar batalla para remontar en la clasificación y salir como sea de la zona de descenso. Si hemos luchado toda la vida, ahora iremos a jugar aunque sea en una moto mobylette".

Para todo aquel que quisiera colaborar en que, por lo menos, el Sant Gabriel termine la Liga, el club ha puesto a disposición de las personas un número de cuenta donde ingresar los donativos: 2100 0098 8702 0066 0104 de laCaixa.

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