Como decía Moyes en rueda de prensa, tendremos que venir más veces a Madrid. Y como si de bailar chotis habláramos, el de Getafe y el de Vallecas han sido los dos únicos prados donde el chulapo vestido de naranja y negro, ha sabido ganarse a la dama castiza. Y es que la Real Sociedad solo ha logrado victorias lejos de Anoeta en tierras madrileñas.

Fiesta y muy buen ambiente en Vallecas

¡Qué bonito es el fútbol cuando se disfruta en conjunto! Ese es el pensamiento que tendrán los aficionados de ambos equipos después de haber vivido otra muy buena experiencia como la que se vivió en Vallecas. En los compases anteriores al partido, ambas aficiones se encontraban entremezcladas en los alrededores del siempre incómodo pero especial estadio, disfrutando tanto en los bares de los alrededores como a la espera de la llegada de los autobuses con los protagonistas.

Ambas aficiones mostraron su hermanamiento en el Estadio de Vallecas

La llegada de los autobuses de ambos equipos fue el primer momento a recordar de los muchos que deparaba una tarde llena de goles, disfrute y despedidas, estas por el lado madrileño. El primero en llegar fue el de la Real Sociedad. Recibiendo a los jugadores con aplausos y ánimos por parte de los numerosos aficionados que esperaban ese momento, siendo una de las llegadas más acogedoras de entre las que se dan en un partido lejos de Anoeta en la temporada.

Después llegó el Rayo, y la afición respondió como el equipo madrileño merece después de una más que meritoria temporada. Es así que se formó un pasillo entre el gentío, donde además se entremezclaban las camisetas de uno y otro conjunto, para que los jugadores madrileños pasaran entre él y notaran el apoyo y la satisfacción por su labor, siendo este el último partido que algunos jugarían como rayistas y dando una vez más ejemplo de que el fútbol en Vallecas se vive de forma diferente.

Partido vistoso para cerrar la temporada

Aunque a las 18:30 debido a la más que improbable cábala de resultados que podrían posicionar al Rayo en puestos europeos, el de Vallecas fue el partido donde menos se jugaba uno y otro conjunto de entre los que se disputaron en la misma franja de horarios aspecto que se notó tanto en las gradas como en el terreno de juego. Unas gradas que por su parte, contaron con presencia txuri-urdin y una buena entrada general para despedir la temporada.

Empezó el Rayo algo más activo, teniendo varias ocasiones ante la portería de Rulli, destacando un cabezazo de Alberto Bueno que dio al larguero y que podría haber significado el uno a cero. Aunque por el contrario, fue la Real Sociedad en su segunda llegada clara a la meta de Toño quien hizo el primer gol, obra de Vela, poniendo por delante a los blanquiazules, ayer de naranja, en Vallecas.

Errores defensivos en ambos goles del Rayo Vallecano

Tan solo dos minutos después, entre Rubén Pardo y Chory Castro fabricaron el segundo de la Real, cuando el riojano le dio una asistencia magistral al uruguayo que empalmo de bolea el balón cruzándolo al lado contrario de la portería de Toño. Cero a dos, la Real encontrando la mejor versión de sí misma en Vallecas y un estadio que pese a ver perder a su equipo alzaba las bufandas al vuelo. Y no se sabe si fue ese aliento por parte de la grada o las continuas correcciones de Paco Jémez desde la banda, las que hicieron meter una marcha más al conjunto madrileño, el cual logró acortar distancias al filo del descanso gracias a un gol obra de Alberto Bueno y que contó con un fallo en el marcaje de la defensa blanquiazul.

La segunda parte empezó con un Rayo mucho más activo, quien en el minuto 64 logró el empate a la salida de un córner donde otra vez hubo errores defensivos en las marcas por parte de los jugadores realistas, hecho que aprovechó Morcillo para poner la igualada y despertar aún más a la afición que veía como su equipo daba la vuelta a un cero dos en contra.

Al igual que en la primera parte, la Real volvió a tener dos minutos de gloria en la segunda cuando en el minuto 74 y 75, Agirretxe en una ocasión y un zapatazo a la escuadra de Elustondo, quien lo celebró con todo el banquillo, en otra, pusieron de nuevo por delante a la Real recuperando la renta de dos goles de ventaja, que esta vez sí que fue insalvable para los madrileños acabando el resultado con un dos cuatro a favor d los de David Moyes.

Resultado que no apagó el ambiente festivo en Vallecas

Pese a la derrota, en Vallecas continuó el ambiente festivo después de la buena temporada del Rayo, quien acaba en el puesto undécimo, justo por delante de su rival de ayer, la Real Sociedad, y con unos más que meritorios 49 puntos que le han posibilitado evitar el descenso mucho antes de lo que la parroquia vallecana pudiera creer a principio de temporada.

Este hecho tuvo su agradecimiento una vez terminó el partido donde los jugadores salieron de nuevo al terreno de juego con una pancarta donde mostraron el apoyo recibido por parte de la siempre incondicional afición.

Por su parte, a la Real le sirvió para concluir una temporada triste y amarga con no tan mal sabor de boca, logrando una victoria clara y poniendo inicio a lo que pretende ser un nuevo año que tal como ha mencionado Moyes en diversas ocasiones, ha de contar con muchas novedades tanto en la plantilla como en el cuerpo técnico y que ha de servir para volver a ser un equipo con un estilo de juego marcado y al que sea difícil hacer ocasiones y marcar gol.