No es casualidad que la Real Sociedad ocupe la primera plaza de la primera división junto a Barcelona, Athletic y Atlético Féminas. No es casualidad que aún no conozcan la derrota, que hayan logrado tres victorias consecutivas y que con sus nueve goles a favor y tan solo tres en contra, solo el Atlético ha encajado un gol menos que las txuriurdin, sea uno de los equipos más solventes de la actual competición.

En El Vivero volvieron a demostrar que es un equipo joven, con mucha progresión pero también mucho fútbol y mucha experiencia. Y lo hicieron en el mejor contexto posible para ello, encajando en tan solo tres minutos un gol y tener que jugar a contracorriente casi todo el partido.

Un saque de banda que condicionó el partido

Fue la Real Sociedad la que sacó de centro aunque en pocos segundos el balón paso a pies de las jugadoras locales. En su primer ataque el Santa Teresa forzó un saque de banda que aprovechó para cambiar el sino del partido. Un despiste defensivo, un pase atrás y una jugadora que aprovecha el regalo para marcar el primer gol del partido y poner muy cuesta arriba la victoria a las de Igor San Miguel.

Un fallo defensivo propició que la Real Sociedad comenzara el partido en desventaja

El gol de Chica Martín  tan pronto arrancó el choque entre el Santa Teresa y la Real Sociedad hizo cambiar, por momentos, el ritmo del partido. Las donostiarras reaccionaron y fueron a buscar el tanto de la igualada pero convirtieron el partido en un correcalles donde cualquiera de los dos conjuntos pudo haber logrado el gol. De hecho, el Santa Teresa estuvo más cerca de cobrar mayor ventaja tras mandar el balón a la cruceta de la portería defendida por Mariasun Quiñones. La guardameta txuriurdin perdió protagonismo en la segunda mitad aunque en el primer tiempo, sus intervenciones fueron determinantes para que la Real Sociedad llegará al descanso con opciones de remontar el partido.

Esta situación duró cerca de 20 minutos, hasta que la Real Sociedad se dio cuenta de que bajar el ritmo, dominar el balón y hacer valer su calidad en el centro del campo le iba a reportar más rédito que buscar la portería rival sin más idea que la de enviar el balón al fondo de las mallas. Bajar las pulsaciones al choque fue determinante para que, primero, Leyre Fernández y más tarde Nahikari García tuvieran ocasiones como para igualar la contienda. La delantera de Urnieta pudo haber sido determinante en un forcejeo y posterior caída dentro del área si el colegiado lo hubiera castigado con penalti.

Con un dominio total del partido, con las centrocampistas de la Real marcando el ritmo del juego, llegó el tanto del empate. Paradójicamente, no llegó en jugada elaborada sino tras un gran lanzamiento de falta directa de Itxaso Uriarte. La centrocampista de la Real golpeó a la perfección un balón en la frontal del área que se coló en la portería de Miriam sin que ésta pudiera hacer nada para evitarlo. 

Una segunda mitad de claro color txuriurdin

El protagonismo de Mariasun Quiñones pasó a ser anecdótico en la segunda mitad. Tan solo intervino en un par de ocasiones en las que la salida del balón de las donostiarras no fue buena y la contra del Santa Teresa casi le cuesta un disgusto al conjunto de Igor San Miguel.

Obviando estos arranques puntuales de las locales, la Real fue dueña y señora del centro del campo a lo largo de la segunda mitad. La salida de Chini Pizarro por Maialen Zelaia (min. 46) hizo que el control txuriurdin fuera aún mayor y que las visitantes se volcaran en busca del segundo gol que por juego, constancia y determinación se estaban ganando.

Nahikari sigue con su olfato goleador, convirtió un mal despeje en un auténtico golazo

Éste llegó en el minuto 70, tras un enésimo balón que las de Igor San Miguel colgaron al área del Santa Teresa. El centro de Itziar Gastearena desde la derecha fue despejado por la defensa local y llegó a Nahikari, quien resolvió con una gran chilena dentro del área para adelantar a la Real Sociedad. Un auténtico golazo que sirvió para que cuando Nahikari dejó el terreno de juego de El Vivero por Eguzkiñe Peña fuera despedida entre aplausos.

La reacción donostiarra tras el gol fue la de seguir con la presión en el centro del campo en vez de plegar velas y defender el resultado. El dominio era visitante e Igor San Miguel echó más madera sacando al terreno de juego más oxigeno al centro del campo y al ataque realista con María Díaz, Paola Soldevila y Eguzkiñe Peña.

Diez minutos le bastaron a María Díaz para, tras una arrancada por la banda marca de la casa, lograr el definitivo 1-3 y certificar una victoria muy merecida por las txuriurdin. El centro de la funesina se fue envenenando hasta pegar en una defensora y entrar en la meta teresina.

Tercera victoria consecutiva y liderato

Tras tres victorias consecutivas todos miran ahora a lo que ocurrió en la primera jornada ante el Albacete, de los dos puntos perdidos que, tras cuatro jornadas, les hubiera dado a las donostiarras un histórico liderazgo en solitario. Mantener la renta de dos goles hubiera sido suficiente para romper el empate que ahora mismo existe entre los hasta ahora gallos de la competición, Real Sociedad, Barcelona, Atlético Féminas y Athletic Club.