Es un hecho indudable que la Real Sociedad no está consiguiendo los resultados que se esperan de un club con la plantilla que dispone el conjunto txuri-urdin. Los realistas suman su segunda temporada seguida viviendo en tierra de nadie, y hasta tres entrenadores han dirigido la donostiarra en este breve espacio de tiempo.

En la actualidad, es Eusebio Sacristán quien tiene la responsabilidad de dirigir al conjunto donostiarra, y tras 18 jornadas como técnico del primer equipo se pueden sacar algunas conclusiones de su etapa en la Real Sociedad.

Rumbo enderezado

Si bien la Real no ha estado seriamente cerca de puestos europeos, se acercó a tres puntos del séptimo en su mejor etapa de la temporada, lo cierto es que el preparador vallisoletano ha logrado espantar los fantasmas del descenso, que en ciertos momentos de la etapa de Moyes llegaron a aparecer. Más por desencanto con la situación que por miedo real.

Cabe aclarar que la labor de Moyes en San Sebastián nunca fue sencilla y todos, incluyendo el propio técnico escocés, tienen en mayor o menor medida culpa. No se le puede vender a la afición un objetivo ambicioso, y no disponer de los medios futbolísticos o técnicos para alcanzarlo.

Ya sea por unas expectativas exorbitadas, o por unos medios muy escasos para conseguir esos objetivos, lo cierto es que la salida se antojaba necesaria, ya que ambas partes, el club y el técnico, nunca parecieron entenderse. Quizás nunca han estuvieron predestinados a entenderse.

En mitad de tabla

Si jugamos a imaginar, imaginemos una liga que comienza desde la llegada de Eusebio al banquillo de la Real en la jornada 12. Desde esta fecha, el conjunto realista estaría situado ligeramente por encima de la posición que ocupa actualmente, aunque mucho más cerca de los hipotéticos puestos europeos.

Estadísticas generales
Entrenador Jornadas Posición Puntos    Goles a favor y en contra Vic. Emp. y Der.
Moyes 1-11 16º 9 12 GF y 14 GC 2V, 3E y 6D
Eusebio 12-30 26 25 GF y 27 GC 7V, 5E y 7D
General 1-30 11º 35 37 GF y 41 GC 9V, 8E y 13D

En una clasificación así, como vemos la Real estaría novena, teniendo a cuatro puntos la hipotética sexta plaza del Athletic (30 puntos), e incluso soñando un poco más, estaría a ocho puntos del Villarreal, que al igual que en la realidad, estaría cuarto con 34 puntos.

Las estadísticas, vistas así, pueden parecer bastante favorables a Moyes, pero el técnico escocés estuvo menos jornadas durante esta campaña al frente del banquillo. Sin embargo, llevados esos datos a “un partido” Eusebio sigue quedando mejor parado.

Estadísticas por partido
Entrenador Puntos Goles a favor Goles en contra
Moyes 0,81 1,09 1,27
Eusebio 1,44 1,39 1,5
General 1,17 1,23 1,37

La imagen por encima de los resultados

No obstante, es la imagen ofrecida en ciertos momentos de la temporada la brilla y defiende la labor de Eusebio Sacristán al frente de la Real Sociedad. Con deshonrosas excepciones, la derrota 5-1 frente al Sporting es el máximo exponente de ello, la Real ha conseguido ofrecer una mejor imagen que la que se veía en la etapa de Moyes.

El equipo vuelve poco a poco a querer buscar la pelota, pero sin obsesionarse, ya que en varios encuentros ha logrado salir victorioso sin dominar en posesión de la pelota, pero jugando con inteligencia cuando se estaba en posesión de ella.

Otro de los aspectos en los que la presencia de Eusebio ha ayudado al club es la facilidad con el que el equipo puede variar de esquema táctico sin sentirse extraño, tanto de partido a partido, como durante el propio choque.

Volviendo a hacer una excepción con el planteamiento del Vicente Calderón, la Real se ha movido con soltura entre el 1-4-3-3 y el 1-4-2-3-1, dependiendo los efectivos disponibles y del rival de turno. Parece ser que hasta ahora el técnico vallisoletano prefiere la primera opción, pero no ha dado muestras de querer enrocarse en su idea, si no que busca lo mejor para cada momento.

Mejoría en varios jugadores

Varios jugadores han dado un salto de calidad desde la llegada de Eusebio. Dejando a un lado el tema de los canteranos, en donde destaca Oyarzabal, futbolistas como Pardo, Illarramendi o Jonathas han dado un paso adelante, y se acercan un poco más al nivel que se espera de ellos. Si bien todavía queda trabajo por delante.

La mejoría de ambos centrocampistas no se entendería sin la figura de un centrocampista de corte más defensivo por detrás. Cuando las lesiones o las sanciones lo han permitido, la presencia de un jugador que libre a ambos de tareas defensivas les ha permitido explotar sus cualidades.

Sin duda alguna, el caso de Pardo el más notorio, ya que el riojano suma un buen número de asistencias, y da la sensación de que por fin esta cerca de explotar y de demostrar las expectativas que se habían puesto en él al inicio de su carrera.

El caso Vela el mayor lunar

No obstante, existe un lunar, un gran lunar en esta historia. Lo acontecido en el “Caso Vela” ha hecho mucho daño, y no solo al jugador, ya que muchas partes del club se han visto afectadas, y entre ellas el propio Eusebio.

Existe también la teoría de que la orden de convocar, y alinear al azteca provienen de la directiva, concretamente del director deportivo Loren, pero eso no deja en mejor lugar a Eusebio, que si bien es lógico que no quiera tener muchos conflictos en su primera temporada como entrenador en Primera, debe ser fiel a sus principios, y a su disciplina como entrenador. Sea la que sea. Su capitanía en el encuentro frente al Celta y Las Palmas no ayuda en la situación.

Rompiendo una lanza a su favor en esta acusación, no hay que olvidar que Eusebio formó parte del Dream Team, encabezado por el recién fallecido Cruyff, y con jugadores como Stoichkov, por lo que sabe perfectamente lo que es convivir con un vestuario con gente con mucha personalidad, y con un entrenador con un carácter superlativo.

Sea como fuere, Eusebio se ha ganado el crédito suficiente para que le dejen hacer su trabajo con mayor tranquilidad, ya que se ha demostrado a lo largo de la historia tanto de la Real como de otros clubes, que tanto cambio de entrenador en tan poco tiempo nunca es bueno. El conjunto donostiarra no va a ser una excepción.